El matrimonio infantil lastra a Malawi, por Javier Domínguez

25/03/2014 | Bitácora africana

Hace un par de años, el Fondo de Población de las Naciones Unidas (FPNU) estimaba que en 2010 había 338.000 mujeres malauíes de entre 20 y 24 años que habían contraído matrimonio antes de los 18. El estudio llamado “Casarse demasiado joven” además advertía que de continuar la tendencia la cifra aumentaría a 631.000 chicas para 2030.

La organización Human Rights Watch (HRW) publicó a principios de mes otro informe, esta vez llamado “Nunca he sentido felicidad”, en el que se hace eco de nuevo de la situación en Malawi del matrimonio infantil.

A pesar de los reconocimientos constitucionales de los derechos de la mujer en Malaui, las niñas siguen consideradas como una carga económica para las familias que las fuerzan a casarse una vez han tenido la primera menstruación. La presión para las jóvenes es muy grande especialmente en las áreas rurales donde las pequeñas incluso pueden llegar a ofrecer servicios sexuales a cambio de dinero o comida.

A pesar de las causas económicas para muchas niñas el matrimonio infantil resulta, a priori e ingenuamente, una vía de escape de la pobreza. Sin embargo, la prematura unión aparta a las niñas del colegio y las obliga a mantenerse al cuidado de la casa y de los hijos. Luchar por un sitio en la escuela es “el billete de salida de la pobreza”, comentaba la activista por los derechos de las mujeres malauíes, Seodi White en una reciente entrevista a GuinGuinBali.

En Malawi a pesar de los esfuerzos de la presidenta Joyce Banda por concienciar a una sociedad patriarcal y de las campañas de empoderamiento de las mujeres, todavía queda mucho por avanzar en materia de igualdad de género como detalla el último análisis de Género de las Naciones Unidas.

En GuinGuinBali recojo hoy las medidas propuestas por HRW sobre el matrimonio infantil en Malawi a través de un artículo titulado: La lacra del matrimonio infantil en Malaui

Ver Video Child Marriage Malawi

Original en : Caminos estrechos

Autor

  • Javier Domínguez periodista español, actualmente vive en la capital de Malaui, Lilongwe , donde como él dice aprendió a valorar la carne de cabra y se refresca a base de la cerveza local Kuche Kuche.

    Estudió en la Universidad de Sevilla, La Rey Juan Carlos de madrid y en Santiago de Chile.

    Autor del el blog "Caminos estrechos" y colabora en El País, Wiriko, Guinguinbali , Periodismo de viajes .... y ahora tenemos la satisfacción que quiera compartir sus caminos en nuestra Bitácora Africana

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