Se acusa al M23 de estar en el centro de un contrabando minero en el este de la RDC, vía Ruanda y Burundi; así lo revela la ONG americana Enough Project, especializada en la lucha contra el genocidio y crímenes contra la humanidad, que se ha hecho eco de la intensificación del tráfico minero desde el este del Congo hacia Ruanda y Burundi. Enough Project acusa abiertamente al M23. El contrabando está al alza a pesar de los esfuerzos gubernamentales congoleños para regular este comercio.
La ONG americana pone como ilustración de la manera como las operaciones de contrabando se desarrollan sobre el terreno un asunto judicial que a mediados de octubre estalló en Goma. Se trata de una carga de coltan de 2 toneladas interceptadas por las autoridades congoleñas en la frontera ruandesa; en la operación estaba implicado un oficial del ejército congoleño, próximo al movimiento rebelde M23. “Es una red que se encarga del relevo de los camiones y de su carga”. Los testimonios recogidos en este proceso judicial han ofrecido una visión no solo sobre la extensión del comercio ilícito de minerales, sino también de la batalla que está en curso entre responsables de la jerarquía militar congoleña.
Enough Project, junto con otras ONG, interpela a los donantes de fondos para que se impliquen eficazmente sobre el terreno y pongan fin al comercio ilícito de minerales en este del Congo; este comercio es la raíz y nervio de la guerra que desde hace una decena de años destruyen esta zona de la RDC. Para Enouh Project es evidente que la gran motivación de la guerra que lleva a cabo el M23 es el control de los minerales, con vistas a su exportación fraudulenta vía Ruanda y Burundi.
(Le Potentiel 25/10/2012)
Resumen y traducción: Ramón Arozarena.