El hombre en el centro del escándalo sexual de Oxfam había dejado un trabajo de la misma índole en Liberia tras afirmarse su participación en fiestas sexuales con mujeres jóvenes. Roland van Hauwermeiren, de 68 años, había estado trabajando en el país de África Occidental cuando un colega se alarmó tanto por su comportamiento y lo denunció a sus superiores. Amira Malik Miller, una extrabajadora de ayuda humanitaria, afirma que alertó a sus jefes en la organización benéfica británica Merlín después de servir allí con Van Hauwermeiren en 2004. Ella asegura que el señor Van Hauwermeiren renunció tras una investigación que descubrió que los altos directivos habían estado usando trabajadoras sexuales locales.
Roland van Hauwermeiren fue reclutado por Oxfam para trabajar en un proyecto unos dos años más tarde en Chad. El mes pasado se vio envuelto en afirmaciones de que tuvo relaciones sexuales con mujeres jóvenes vulnerables mientras trabajaba para Oxfam en Haití en 2011, un año después de que un terremoto devastó el país. Después de enterarse del escándalo que envuelve a Oxfam en el que se nombró a Van Hauwermeiren, Miller, que ahora trabaja como funcionaria sueca, aseguró su asombro de que hubiera logrado trabajar para otra organización benéfica. «Dios mío, ha estado haciendo esto durante 14 años», dijo a IRIN, un sitio web que cubre noticias humanitarias. «Simplemente va por el sistema … de Liberia a Chad a Haití a Bangladesh. Alguien debería haber revisado correctamente».
Amira Malik Miller alertó tanto a Merlín como al departamento de ayuda del gobierno sueco, que pasó a dar casi 540.000 libras esterlinas a la misión de Oxfam en Chad, que Van Hauwermeiren ejecutó.
Una fuente que trabajó para Merlín aseguró a IRIN que una investigación descubrió que cuatro gestores de ayuda de mediana edad se dedicaban a pagar por tener relaciones sexuales en Liberia.
Van Hauwermeiren trabajó como director para Oxfam en Haití en 2011 y presuntamente utilizó prostitutas en la villa alquilada de la institución. Tras una investigación, se le invitó a abandonar. Otros dos miembros del personal renunciaron y cuatro fueron despedidos. Van Hauwermeiren pasó a trabajar en Bangladesh para Acción contra el Hambre.
La organización benéfica Merlin se convirtió en parte de Save the Children en 2013. Un portavoz de Save the Children comunicó que no podían comentar sobre el tiempo de van Hauwermeiren con la organización Merlin ya que eso ocurrió antes de fusionarse las dos organizaciones. El presidente ejecutivo de Merlín en ese momento, Geoff Prescott, no ha estado disponible para hacer comentarios.
Miller se quejó a IRIN de que había un «fallo del sistema» y una «cultura de complacencia» que significaba que las mujeres vulnerables no estaban protegidas. Sin embargo, agregó que su experiencia de «denuncia de irregularidades» no fue negativa y que estaba contenta con la manera en que la ong atendió su queja y castigó a aquellos que debían de serlo.
Fuente: GNN Liberia
[Traducción, Muriel Balda Aspiazu]
[Fundación Sur]
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