La comunidad musulmana de Malí celebró, en la noche del 8 al 9 de octubre, el Maouloud o el nacimiento del profeta Mahoma. El Chérif de Baconi, y guía supremo de los Ansar Dine, estuvo en el estadio 26 de marzo y el Cheick Oumar Seydou Coulibaly, conocido como Farouk, en el estadio Mamadou Konaté. En cuanto a la comunidad de sufíes, encabezada por su guía supremo, Cheick Soufi Bilal Diallo, estuvieron en el estadio Modibo Keïta. Los otros imanes compartieron varios terrenos en la capital. Los menos influyentes permanecieron en sus respectivas mezquitas para predicar y leer el Sagrado Corán. Cherif Ibrahim Haidara estaba en Kenieba, mientras que su hermano menor estaba en Kayes, la ciudad del raíl, para recordar a sus seguidores algunos pasajes del Corán. En todas partes, el festival fue una oportunidad para que los musulmanes hicieran bendiciones por la estabilidad y el regreso de la paz a Malí.
Como es habitual, el guía de los Ansar Dine ofreció sus consejos a las máximas autoridades, recordando la importancia de la honestidad y el respeto a los textos sagrados y los fieles para alcanzar a Dios. El Chérif de Baconi también pidió a las autoridades de la transición que no se vengaran y que no hicieran caso a los malos consejeros. Para Haidara, las máximas autoridades deben estar abiertas y disponibles para escuchar a todos los estratos de la sociedad, sin discriminación para “salvar a la patria”. Al mismo tiempo, aprovechó para pedir la liberación de los presos detenidos sin razón válida.
Fuente: Maliweb
[Traducción y edición, Elena Cañete Montilla]
[CIDAF-UCM]
