La situación de seguridad en Bakouma, norte de la Republica Centro Africana (RCA), sigue siendo muy precaria.
Ayer jueves, a las 16h, la iglesia de San Andrés, en la villa de Bakouma fue atacada por la LRA (Lord Resistence Army) de Joseph Kony. Dos civiles fueron secuestrados y una religiosa fue torturada.
Seis jóvenes más: cuatro chicas y dos chicos fueron secuestrados en otro ataque. Este fue el octavo ataque del grupo LRA, en los cuales cuatro civiles fueron asesinados y muchos más secuestrados y torturados.
Al mismo tiempo, Dominic Ongwen: el ex-segundo en la LRA, está ya en La Haye para su juicio por los crímenes cometidos. Hasta 70 casos por crímenes cometidos pesan sobre D. Ongwen.
Desde 2008, el grupo de LRA, que aterrorizo la población del norte de Uganda durante más de 20 años, sigue cometiendo los mismos crímenes contra la humanidad en la RCA, en la República del Congo y en el sur del Sudan.
Según la ONU, el grupo de LRA ha cometido ya más de 100.000 crímenes mortales y ha secuestrado a más de 60.000 jóvenes.
Los soldados de la ONU (Minusca) intentan proteger a la población, pero con escasa eficacia. Su portavoz Vladimir Monteiro asegura que ellos seguirán protegiendo a la población.
No deja de ser muy extraño, que tantos gobiernos africanos y mundiales sean incapaces de neutralizar un pequeño grupo terrorista, después de tantos años.
¿Quién se beneficia de este caos, inseguridad y tráfico de armas en esta rica region?
Radio Ndeka. RCA
Traducido por AFS
