El gobierno de Libia anunció durante la noche que está evaluando la posibilidad de recurrir a fuerzas internacionales para restablecer la seguridad, especialmente en Trípoli, donde continúan los enfrentamientos entre grupos armados que comenzaron el domingo. Lo declaró en un comunicado el vocero Ahmed Lamine, quien precisó también que el objetivo es “proteger a la población civil y las riquezas del estado y prevenir la anarquía y la inestabilidad, y dar al estado la posibilidad de construir sus instituciones”, principalmente las fuerzas militares y la policía.
Los enfrentamientos entre grupos armados, que comenzaron con el ataque de milicianos islamistas de Misrata contra rebeldes de la localidad de Zintan, han llevado a la clausura del aeropuerto de la capital, causando graves daños a infraestructuras y a una decena de aviones de las líneas Afriqiyah Airways y Libyan Airlines. Una oficina y un edificio de la aduana fueron completamente destruidos y el aeropuerto ha sido el blanco de decenas de misiles en las últimas horas. Según fuentes locales, hasta ahora han muerto 15 personas, incluyendo tres en Bengasi.
Las llamadas del gobierno a cesar el fuego hasta ahora han sido inútiles. Las autoridades anunciaron la formación de una comisión que se encargará de iniciar negociaciones entre los dos grupos rivales para poner fin a los combates. Mientras tanto, la misión de la ONU anunció la retirada temporal de su personal en Libia por razones de seguridad, considerando que en la situación actual no es posible seguir con sus tareas.
Fuente MISNA Fundación Sur