El Presidente de Sudán del Sur, Salva Kiir, ha aceptado declarar un alto el fuego unilateral, con la esperanza de que la medida permita a la comunidad internacional exigir a la oposición armada que también cese las hostilidades. El objetivo es crear las condiciones de seguridad necesarias para que los trabajadores humanitarios lleguen a los civiles en las zonas del país afectadas por la hambruna.
Según un comunicado de la Unión Africana, el Presidente Kiir hizo la declaración en la reciente cumbre de la IGAD en Somalia, en una reunión con el presidente de la Comisión de la UA, Moussa Faki Mahamat.
Mahamat habló sobre la situación de seguridad en el país y la iniciativa de diálogo nacional lanzada por el Presidente Kiir, así como sobre la desastrosa crisis humanitaria:
«En esa ocasión, el Presidente de Sudán del Sur aseguró al Presidente de la UAC que aceptó proclamar unilateralmente un alto el fuego y conceder una amnistía general para promover la participación en el Diálogo Nacional, algo que aceptó como inclusivo y dirigido por una personalidad independiente y respetable«, se lee en la declaración obtenida por Sudan Tribune.
El Presidente Kiir reafirmó además su aceptación del despliegue de la Fuerza de Protección Regional y subrayó el valor añadido que la apropiación africana del proceso político podría aportar al Diálogo Nacional.
Mahamat, que se encontraba en Juba en una misión oficial del 26 al 27 de marzo, se reunió con el primer vicepresidente, Taban Deng Gai, con quien discutió las cuestiones más críticas, incluida la facilitación del acceso de las agencias humanitarias para prestar ayuda a los afectados por la hambruna y asegurar la protección del personal humanitario. Aseguró también a las autoridades que la Unión Africana seguiría apoyando y asistiendo al Gobierno y al pueblo de Sudán del Sur.
La delegación, después de reunirse con el primer vicepresidente en Juba y con otros funcionarios gubernamentales, viajó a Ganylel, en Liech, en la región del Gran Alto Nilo, para adquirir conocimiento de primera mano sobre la difícil situación de la población después del desastre humanitario.
Mientras estuvo en la zona, la delegación se reunió con el vicegobernador y los representantes de la comunidad, incluyendo a las mujeres. Informaron de que la Comisión de la UA estaba haciendo un llamamiento a los países africanos y a la comunidad internacional en general para aumentar su ayuda al pueblo y al Gobierno de Sudán del Sur.
La delegación también visitó los centros de salud, el Centro de Tratamiento del Cólera y el centro de estabilización de los niños gravemente desnutridos, incluso el Comité Internacional de Rescate, que cuenta con recursos limitados.
El presidente de la Comisión de la UA anunció en nombre de la organización que se entregaría una contribución simbólica de 100.000 dólares a las víctimas de la hambruna, y otros 100.000 para ayudar a los niños desnutridos.
Fuente: SudanTribune
[Traducción y edición, Mario Villalba]
[Fundación Sur]
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