Kenia ha abolido todos los impuestos al keroseno y aumentará el salario mínimo la próxima semana para ayudar a las familias con bajos ingresos a enfrentarse a la escalada de los precios de bienes de consumo básicos, según ha declarado el primer ministro, Raila Odinga, el día 27 de abril.
Odinga dijo en el parlamento que la nación del África oriental también eliminará las taxas de importación para el trigo y el maíz de productores privados. “Este incremento [en el salario mínimo] debería haberse producido dentro de dos años, pero lo haremos ahora, para abordar el alto coste de la vida”, señaló Odinga.
El primer ministro dijo que los detalles del aumento de salario mínimo serán divulgados el 1 de mayo.
El salario mínimo mensual medio desde 2009, para un trabajador en el sector agrícola, es de 4.076 chelines keniatas [unos 33 euros], mientras que el de un trabajador en zonas urbanas es de media de 7.607 chelines [unos 62 euros], según las encuestas del gobierno en 2010.
Esta reducción de impuestos sobre el keroseno anunciada por Odinga se produce después de que el ministro de Finanzas, Uhuru Kenyatta, anunciase la semana pasada un recorte del 30 % a los impuestos sobre el keroseno, para amortiguar el impacto de la escalada de los precios del combustible.
Los precios del combustible pueden tener un efecto importante sobre el índice de inflación en Kenia, la mayor economía del este de África, porque muchos de sus 40 millones de habitantes dependen del keroseno para tener luz y cocinar.
Odinga dijo que esta última medida del gobierno recortará el precio del keroseno en más de siete chelines el litro.
(News 24, 28-04-11)