Militares, policías, miembros de la sociedad civil, periodistas y hasta comerciantes, según la Fiscalía General de Burundi, serían los organizadores de las protestas contra el tercer mandato del presidente Pierre Nkurunziza, del intento de golpe del 13 de mayo e incluso de ataques dirigidos (algunos de ellos mortales) contra importantes miembros del ejército ocurridos en las últimas semanas.
El gobierno burundés, luego de que Nkurunziza fuera reconfirmado en elecciones criticadas por la comunidad internacional, se está preparando para enfrentar en la corte la disidencia reprimida en las calles. El fiscal general Valentin Bagorikunda informó que emitió órdenes internacionales de arresto contra los presuntos líderes y organizadores de las protestas.
«Los organizadores civiles de la insurgencia estaban en contacto permanente con los líderes militares y políticos de los golpistas», se denunció formalmente durante una conferencia de prensa. El fiscal también proporcionó una estimación de los daños causados ??por las protestas: casi 32.000.000 millones de dólares.
MISNA (Fundación Sur)