Las políticas de austeridad del FMI, además de violar la soberanía de los pueblos, aniquilan los derechos más elementales de las personas. Es necesaria comprenderlas mejor como un proyecto político a escala internacional, expresión de una estrategia deliberada de transformación social a escala mundial cuyo objetivo principal es hacer del planeta un campo de acción en donde las sociedades transnacionales podrán operar con toda seguridad.
Unos días antes de la asamblea anual del FMI y de la Banca Mundial que tuvo lugar del 11 al 13 de Octubre en Washington el FMI ha vuelto a la carga. Concretamente en España, después de haber propuesto una bajada de salarios también ha reclamado reducir la lista de productos y servicios considerados básicos o de primera necesidad que benefician a las tasas reducidas del TVA. Estas medidas son del mismo calibre y remedio que producen los famosos motines del hambre también llamados “motines del FMI” en el Sur del planeta cuando el precio del pan o de la gasolina subía de un golpe de la noche a la mañana hasta precios imposibles para la mayoría de la población.
En suma, el FMI sigue el camino de austeridad que siempre ha aplicado al Sur, en donde sus políticas están encalladas desde decenios. Fuera de algunas nuevas proposiciones sobre las retenciones fiscales no hay nada de nuevo en la ideología de la institución. Ya en 1999 en un informe sobre los “Efectos de políticas de ajustamiento estructural sobre el disfrute efectivo de los Derechos del hombre”, la Comisión de los Derechos humanos del hombre de las Naciones Unidas llevaba sobre los planes de austeridad en el Sur se constata que podemos aplicar lo mismo a la actual crisis de la deuda del Norte. “Desgraciadamente tanto el FMI como la Banca Mundial consideran la gestión de la crisis de endeudamiento como una actividad distinta de la tarea fundamental que es el desarrollo humano. Un fuerte crecimiento de los Ingresos brutos nacionales o la reducción de la inflación no desembocan en desarrollo sino es con la condición de acompañarse de cambios en la repartición de los ingresos de manera que permita a una parte más grande de la población de disfrutar efectivamente de sus derechos económicos, sociales y culturales.
F. Martín, Jérôme Duval
Pambazuka news.
Traducido y editado para Fundación Sur