El periodista saharaui Hassanna Aalia, de 26 años, miembro de la Asociación Saharaui de Víctimas por los Derechos Humanos (ASVDH) y del medio informativo Equipe Media (EM) en Territorios Ocupados del Sáhara Occidental acaba de conocer la noticia de la denegación por parte del Estado español de su petición de asilo político. La consecuencia inmediata de esta negación es que Aalia debe abandonar el territorio español en el plazo de 15 días, lo que podría ocasionar que acabará cumpliendo la sentencia ilegal de cadena perpetua con la que fue condenado el 17 de febrero de 2013 por el Tribunal Militar de Rabat (Marruecos).
Y digo que es ilegal por todas las irregularidades que se cometieron en el citado juicio, en el que fueron condenados otros 24 saharauis que continúan hoy en día en prisión, con condenas que oscilan entre los 20 años y la cadena perpetua. Su delito, formar parte del levantamiento del conocido como ‘Campamento de la Dignidad’ de Gdeim Izik. Este campamento surgió cerca de la ciudad de El Aaiun el 10 de octubre de 2010 con la pretensión de mejorar las condiciones sociales y políticas de la población saharaui que vive bajo la ocupación marroquí, y fue brutalmente desalojado el 8 de noviembre de 2010 por dichas fuerzas de ocupación.
El caso de Hassanna Aalia es más injusto si cabe, ya que fue juzgado dos veces por su pertenencia al campamento. Algo ilegal desde el punto de vista del Derecho ya que una persona no puede ser juzgada dos veces por los mismos hechos según el principio jurídico de “non bis in ídem”.
La primera vez fue puesto en libertad después de pasar 4 meses en prisión. Tras la primera sentencia, entró y salió del país legalmente hasta que en noviembre de 2012 recibió la orden de búsqueda y captura cuando se encontraba en el Estado español, se le buscaba para volver a ser juzgado por el mismo delito, esta vez en un Tribunal Militar. Al no presentarse, fue juzgado en rebeldía y condenado a cadena perpetua. Paralelamente Hassanna iniciaba los trámites de asilo político en el Estado español. Asilo que fue denegado ayer y que le sitúa en una situación de grave indefensión como consecuencia de las actuaciones de las autoridades españolas y marroquíes.
Todas las personas, organizaciones, colectivos o asociaciones de Aragón que defienden y trabajan por los Derechos Humanos, debemos denunciar este caso hasta conseguir, entre todas, parar esta resolución injusta e inhumana. Del mismo modo es imprescindible seguir denunciando la ocupación marroquí y la explotación de los recursos naturales del Sáhara Occidental hasta conseguir la independencia del pueblo saharaui. Os animo pues a participar en la campaña de apoyo a la petición de asilo político para Hassanna Aalia.
Autor del artículo: Roberto Gracia, secretario territorial de Puyalón de Cuchas
Fuente : AraInfo