La República de Guinea o Guinea Conakry no sólo es conocida por ser un país productor de oro, diamantes o bauxita, sino también por ser uno de los países de la costa oeste de África con una gran tradición cultural y circense.
10 millones de guineanos, 24 grupos étnicos y jóvenes creativos que hacen que iniciativas como la del Circo Mandingue no pase desapercibida. Creado en 2009, sus artistas después de años de perfeccionar sus habilidades en las playas de Conakry, son conocidos por realizar movimientos físicamente difíciles y hacer que parezcan fáciles. Pirámides humanas y posturas imposibles, así es el Cirque Mandingue.
Escuela y compañía de circo, el dinero que ganan de sus giras internacionales sirve para la escuela en Guinea que instruye a 30 jóvenes artistas. Yamoussa Camara, conocido como Junior, es el líder de la compañía, el líder de acróbatas del grupo y el director de la escuela. Fatou Sylla, es la única mujer. Naby Youla, cuyas hazañas de contorsión hacen temer por su columna vertebral, empezó a aprender acrobacias cuando tenía 10 años y además de ser una impresionante contorsionista, baila y toca el djembe. Aboubacar Camara, también empezó a los 10 años, aprendiendo de sus amigos en las playas de Conakry. A los 15 su trabajo se vio recompensado cuando empezó a trabajar con Junior, que en aquella época era miembro de la compañía del Circo Baobab (una de las compañías más famosas de Guinea). Poco después, Camara enseñó a su amigo N’Famoussa Soumah, uno de los más jóvenes integrantes y lo ayudó a unirse al Circo Mandingue. Así, la compañía fue creciendo. Jóvenes con diferentes historias y con ganas de conquistar el mundo.
Creatividad, percusión, acrobacia, baile y un montaje teatral combinado con la pasión de estos artistas hacen que sus espectáculos siempre sean únicos. Danza y música dan como resultado una mezcla explosiva. De fondo música de djembe y en el centro acróbatas concentrados y llenos de energía que hacen las delicias del espectador. Es imposible no dejarse transportar a las calles de Conakry. La energía siempre está ahí.
Una de las actuaciones más impresionante, es la del contorsionista (Abdoulaye Keita) que se dobla y retuerce como si tuviera la estructura ósea de una serpiente. La música en vivo y la atmósfera trasladan al espectador a otro mundo donde las hazañas de agilidad vertiginosas de los acróbatas desafían la gravedad.
Mandingue es un acto, un espectáculo de hazañas de acrobacia impresionantes. Países diferentes, cautivando a millones de espectadores, así es el Cirque Mandingue.
Original en : Afribuku
