La Comisión Anticorrupción, ACC, de Sierra Leona, ha declarado al ejército del país, las Fuerzas Armadas de Sierra Leona, un 75 % libre de corrupción.
La comisión ha relacionado esta alta puntuación del ejército a sus esfuerzos por cortar las prácticas corruptas dentro de sus filas y a la totalidad de sus operaciones. “El ejército debería dar ejemplo y no dejar espacio para la duda”, señaló Joseph Fitzgerald Kamara, jefe de la Anticorrupción en Sierra Leona, y añadió: “me complace informar de que el ejército está altamente valorado, con un 75% en la lucha contra la corrupción”.
La corrupción, sin embargo, sigue siendo un gran problema en la mayoría de los sectores en Sierra Leona. Actualmente, el país ocupa el puesto 134 de 178, en el índice de percepción de corrupción de la organización Tranparency Internacional.
Esto se ve ampliamente reflejado en el número de juicios de alto perfil que se han registrado desde que se restauraron los poderes a la Comisión, después de la elección del presidente Ernest Bai Koroma, en 2008.
Vigilados de cerca
Las instituciones de Seguridad, principalmente la policía, están consideradas muy corruptas por el pueblo. Pero con esta declaración, el ejército del país ahora destaca como un buen ejemplo.
Sin embargo, a pesar de las felicitaciones, el jefe anti corrupción lanzó algunas advertencias al ejército.
Aconsejó que los ascensos, las transferencias y los despliegues, así como la distribución de arroz al personal militar, sea vigilado de cerca. “Es importante establecer un sistema de responsabilidad que defina claramente las responsabilidades del personal, y supervisar de forma efectiva sus actividades”, señaló.
El señor Kamara dijo a los oficiales reunidos en el cuartel más importante del país, Wilberforce, en Freetown, que la corrupción era atribuible a prácticas políticas injustas y a un sistema administrativo demasiado centralizado.
Las remuneraciones inadecuadas y las deficiencias en los mecanismos de aplicación de la ley, también tienen parte de responsabilidad. “Ahora es necesario seguir con el crecimiento organizacional y desarrollar medidas de fomento de la confianza entre los oficiales y los rangos más bajos”, dijo.
KEMO CHAM, desde Freetown
(Africa Review, Kenia, 28-06-11)