El ejército de Estados Unidos está expandiendo una red secreta de bases aéreas por toda África, para espiar a Al Qaeda y otros grupos militantes, según ha informado el Washington Post, el día 13 de junio.
La vigilancia es llevada a cabo por pequeños aviones turbohélices camuflados con modernos sensores que vuelan miles de kilómetros entre las bases aéreas y pistas de aterrizaje en la selva, por todo el vasto continente.
El programa, que data de 2007, pone de relieve la enorme expansión de las operaciones de las fuerzas especiales de Estados Unidos, en los últimos años, y la militarización constante de las operaciones de inteligencia durante una década de guerra contra Al Qaeda.
Las bases en Burkina Faso y Mauritania son utilizadas para espiar a Al Qaeda en el Magreb Islámico, AQMI, mientras que las bases de Uganda son utilizadas para perseguir a la guerrilla del LRA o Ejército de Resistencia del Señor, liderado por Joseph Kony, perseguido por crímenes de guerra en el Tribunal Penal Internacional.
El periódico estadounidense dice que hay planes para abrir otra base en Sudán del Sur, para ayudar en la persecución de Kony.
En África oriental, los aviones especiales estadounidenses operan desde Yibuti, Etiopía y Kenia, además de las Seychelles, para espiar al grupo de Somalia inspirado en Al Qaeda, Al Shabaab, y supuestamente han lanzado ataques contra militantes.
Esfuerzo por ser discreto
El diario afirma que la flota de aviones de vigilancia está compuesta por Pilatus PC-12 de un solo motor, pequeños aviones de pasajeros y aviones de carga fabricados en Suiza.
Según el diario, una de las bases secretas está en un hangar retirado y solitario en Uagadugú, la capital de Burkina Faso, predominantemente musulmán.
Se dice que decenas de miembros del servicio y contratistas se esfuerzan por ser discretos, pero son notorios en el centro de la ciudad, donde son muy apreciados por el negocio que llevan a los bares y restaurantes.
El ministro de Exteriores de Burkina Faso, Djibril Bassole, en una entrevista con el Washington Post, no quiso responder a preguntas sobre las operaciones de las fuerzas especiales de Estados Unidos en su país, pero dijo que apreciaban la “cooperación en materia de seguridad de los Estados Unidos”.
“Necesitamos combatir y proteger nuestras fronteras”, cita el periódico americano, “una vez que se han infiltrado en tu país, es muy, muy difícil echarles”, explicó haciendo referencia a Al Qaeda.
(News 24, 15-06-12)