Estábamos tan tranquilos en el panorama sanitario africano…! Que se murieran dos millones al año por causa de la malaria no nos preocupaba, lo mismo se diga del sida, cuyo protagonismo desapareció de las pantallas de nuestras televisiones… Sin hablar de la desnutrición infantil, de la tuberculosis y de otras enfermedades tropicales, peores que las diez plagas de Egipto…
TÉCNICOS SANITARIOS CABOVERDIANOS AMPLIAN EN CANARIAS SUS CONOCIMIENTOS SOBRE ENFERMEDADES TROPICALES.
Ha hecho falta que el ébola renaciese de sus cenizas para que suene la alarma, sobre todo que de esta vez se ha llevado por delante a unos cuantos misioneros y cooperantes occidentales.
Esto es lo positivo del ébola, que ha despertado la cooperación entre las naciones y los pueblos. El archipiélago de Cabo Verde es como el vecino de la planta inferior de las Canarias. Por eso un grupo de técnicos de las áreas de medicina, biología y farmacia se van a las islas Canarias, donde van a profundizar y poner al día sus conocimientos en materia de salud pública y enfermedades tropicales en el CAMPUS AFRICA organizado por la Fundación Canaria para el control de las enfermedades tropicales, en la universidad tinerfeña de La Laguna.
Según un comunicado del Ministerio de Educación Superior, Ciencia e Innovación de cabo Verde, este plan de formación en el Campus AFRICA, se ve como una gran oportunidad para el intercambio de experiencias entre los profesionales y expertos, que estarán en Canarias, pues han anunciado su participación especialistas de los mejores laboratorios de todo el mundo en la lucha contra la malaria, el dengue, el ébola y otras plagas …
El programa se inaugura en La Laguna el 26 de septiembre y se prolongara hasta el 10 de octubre próximo. Las actividades se centrarán en los dos programas de formación avanzada, el programa general de técnicas de sensibilización popular para protegerse de dichas enfermedades y el programa científico.
Hacemos votos para que esta colaboración continúe entre Canarias y toda el Africa occidental en particular.
Por otro lado nos llegan noticias positivas de la colaboración de las Iglesias Cristianas en la sensibilización de las poblaciones para prevenir el contagio del ébola, del sida y otras enfermedades infecciosas endémicas de aquellas regiones tropicales.
Si los misioneros y sacerdotes nativos, los hermanos y religiosas, además de los líderes laicos de las comunidades cristianas, tanto en sus charlas, como en las conversaciones durante sus visitas a las familias abordan estos temas, la gente comprenderá porqué en ciertas circunstancias hay que ‘saltarse la costumbre’ heredada de los antepasados, como lavar el cadáver del difunto, abrazarlo y besarlo durante el duelo…y porqué hay que quemar los cuerpos en vez de enterrarlos, quemando también sus ropas. Todo un conjunto de normas sanitarias que contradicen las costumbres, que en muchas etnias son consideradas intocables, porque establecidas por los ancestros desde hace milenios. El virus del ébola aún no se había descubierto y si morían por su contaminación, decían como en la Europa de la Edad Media: “Murió de la peste negra!”