Más de 150 jefes de Estado y de Gobierno de todo el mundo participan en la conferencia sobre el clima, la COP21, que se inauguró el lunes por la mañana en París. Este es el caso de Barack Obama, Xi Jinping, o Putin, pero igualmente hay muchos líderes africanos. Denis Sassou Nguesso, Presidente de Congo Brazzaville, es uno de los principales jefes de estado del continente, que es el más afectado por el calentamiento global.
El jefe del Estado congoleño llegó el pasado domingo de madrugada, a la capital francesa, que acoge del 30 noviembre al 10 diciembre 2015, bajo los auspicios de las Naciones Unidas, la Conferencia Mundial sobre el Cambio Climático (COP21 ). Hay mucho en juego: se trata de lograr un acuerdo internacional vinculante para frenar y contener el aumento de la temperatura media global por debajo de 2 ° C.
A la cabeza de una numerosa delegación, muestra del interés del Congo por la cuestión del calentamiento global, el Presidente Denis Sassou Nguesso, tiene la intención de utilizar esta plataforma internacional para recordar la lucha en la que está comprometido su país para la preservación de su vasto patrimonio natural y sus frágiles ecosistemas. Congo Brazzaville, cuyo territorio está cubierto en dos tercios por bosque primario, ha trabajado muy duro en los últimos años para preservar su fauna y flora cuya diversidad es excepcional.
Para proteger mejor sus bosques y sus muy valiosas biodiversidades, Congo ha estado implementando el Programa de Reforestación y Forestación Nacional (PRONAR). Su objetivo es conseguir la plantación de un millón de hectáreas de bosques en diez años, una operación para ampliar aún más el ya vasto forestal congoleño. El país, cubierto en más del 11% por bosques vírgenes de la cuenca del Congo, se considera uno de los principales «pulmones verdes» del planeta, junto con el Amazonas y los bosques de Indonesia.
Pero más allá del valor de sus propias acciones, algunas de las cuales pueden servir de ejemplo para otros países, Congo, a través de la voz de su dirigente, Denis Sassou Nguesso, pretende, sobre todo, aprovechar esta COP21 para poner todo su peso y utilizar toda su influencia para abogar por África. El continente africano es una de las principales víctimas del calentamiento global. En 2012, África contaba ya con más de 8 millones de desplazados climáticos. Una cifra que podría crecer de forma exponencial si no se hace nada en un futuro cercano.
Además del clima, los intereses de África deben ser salvaguardados más que nunca durante esta COP21 y el Congo, en particular, tiene la intención de asegurarse de ello.
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Fundación Sur