Abu Maria al-Qahtani, una figura prominente en la escena yihadista, perdió la vida victima de un atentado suicida en Sarmada, al norte de Idlib, Siria. Nacido en Irak, al-Qahtani desempeñó un papel crucial en la fundación del Frente Al-Nusra, la rama siria de Al Qaeda, antes de defender su separación de la organización terrorista internacional. El grupo al que pertenecía al-Qahtani, Hayat Tahrir al-Sham (HTS), atribuyó el asesinato al grupo yihadista rival Estado Islámico (EI), describiendo el ataque como un acto cobarde llevado a cabo por un miembro del EI equipado con un cinturón explosivo. El Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) confirmó el incidente, aunque el responsable del ataque no ha sido oficialmente identificado hasta el momento.

Previo a su fallecimiento, al-Qahtani había sido liberado de prisión el 7 de marzo, tras pasar siete meses detenido por «traición», y ser absuelto por el HTS. Al-Qahtani había sido objeto de sanciones por parte de Estados Unidos desde 2012 debido a sus vínculos con Al Qaeda y el Frente Al-Nusra. Considerado un miembro del ala «moderada» del Frente Al-Nusra, había abogado posteriormente por una ruptura con Al-Qaeda, una posición que lo había colocado en el centro de las tensiones internas dentro del movimiento yihadista.

Fuente Jeune Afrique

[Traducción y edición, Bruno Rodríguez]

[CIDAF-UCM]