Nombrado hace más o menos un año a la cabeza del Consejo Pontificio de Justicia y Paz, el cardenal ganeano Peter Turkson evalúa la importancia de sus nuevas funciones. Acompañara a Benito XVI a su visita de Estado al Reino Unido del 16 al 19 de Septiembre.
Nombrado a los 61 años por Benito XVI presidente del Consejo Pontificio de Justicia y Paz en Roma (1) el cardenal ganeano Peter Kodwo Appiah Turkson e valúa sus nuevas funciones: “Nuestra estructura es muy ligera-constata-la formamos 18 personas solamente. Sin embargo nuestro campo de acción y de reflexión engloba cuestiones políticas y económicas, el desarme, los derechos del hombre, la ecología…”.
Pero no es cuestión de bajar los brazos ante la amplitud de la tarea: hay que trabajar en colaboración con las Caritas Nacionales, los Corresponsales de Pax Christi, las diócesis, las universidades católicas…”
Siguiendo la tradición de sus predecesores sobre todo del Cardenal francés Roger Etchegaray, el cardenal acude a los lugares en donde hay un problema. Así fue recientemente a Nigeria herida por las luchas inter-étnicas. Este hombre jovial y orgulloso de sus orígenes ama profundamente a África: “El nombre de mi país Ghana viene de un reino africano muy antiguo. Bajo la colonización británica se llamaba Goald Coast, a causa de sus minas de oro”.
Un gran salto fuera de África
La historia de Ghana es religiosa también.”Descubiertos “por los portugueses, nos hicimos católicos. Más tarde con los holandeses que les sucedieron fuimos calvinistas y con los ingleses metodistas y anglicanos. Nuestra iglesia es muy antigua no hemos conocido nunca un cristianismo sin divisiones. “
El padre del cardenal era carpintero católico. Su madre era metodista y más tarde se hizo católica. El matrimonio tuvo diez hijos, seis varones y cuatro hembras. De ahí viene la buena treintena de sobrinos y sobrinas del primer cardenal ganeano de la historia. El recuerda: “vivíamos en Mesuta una ciudad minera. La parroquia estaba atendida de vez en cuando por un misionero holandés. A los diez años le escribí para decirle que quería entrar en el Seminario. Mi padre reunió a toda la familia. Delante de ellos explique mi decisión. Mi padre dio su acuerdo.”
Más tarde di el enorme salto fuera de África: “El obispo me mando a los EEUU. Donde fui ordenado diacono. El 20 de Julio de 1975 fui ordenado sacerdote en mi diócesis de Cape Coast, la diócesis más antigua de Ghana fundada en 1879”.
“En África los lazos familiares y étnicos dan sentido a la vida”
El futuro cardenal continúo sus estudios en Roma en el Instituto Bíblico. Allí el 6 de Octubre de 1992 se entera con gran sorpresa, que ha sido nombrado obispo de su diócesis: “quise ser ordenado en Ghana y no en Roma porque quería estar en medio del pueblo que debía servir. Siempre he pensado que somos ante todo pastores, testigos de Cristo. El poder no debe de ser nuestro objetivo”. Sin embargo cinco años más tarde es elegido presidente de su conferencia Episcopal. Nombrado Cardenal por Juan Pablo II el 2l de Octubre del 2003, acostumbrado a los Sínodos romanos, fue –desde el 4 al 25 de Octubre del 2003- relator general del segundo sínodo de los Obispos de África.
Atento al crecimiento importante del número de católicos africanos, el Cardenal es severo con el catolicismo a la africana: “en África los lazos familiares y étnicos dan sentido a la vida. Pero los bautizados tienen que ampliar su visión hacia los que no son miembros de su familia y de su etnia. Hemos visto en Ruanda hasta que punto esto es difícil. Es un desafío a la Iglesia de África. Hay que recrear una coherencia de vida: muchos bautizados no están profundamente convertidos. Cuando el cristianismo se limita a un formalismo, mas aun a formalidades, no conduce a una relación con Cristo”.
Frente a este peligro, el Cardenal está atento a la evolución de los movimientos carismáticos católicos y a los grupos evangélicos neo -pentecostalistas que quieren colmar este foso, dar un nuevo sentido a la vida espiritual.
“Si Europa fuese menos cristiana nosotros seriamos como huérfanos”
Con respecto a Occidente el Cardenal es también severo. En Octubre del 2009 durante el último sínodo sobre África, él y los otros obispos habían criticado duramente “el nuevo imperialismo cultural, los nuevos modelos de familia venidos de Occidente.
El mismo explica: “en África pensamos que todos somos miembros de una familia humana que tenemos que perpetuar dando la vida. Si nos proponen modos de vida que no permiten engendrar, nosotros decimos que esto es un ataque a la supervivencia de la sociedad. Para nosotros es algo extraño que no conduzca a la vida. De un sentimiento de extrañeza a uno de rechazo no hay más que un paso. Respetar los derechos de las minorías homosexuales en particular no quiere decir reconocer su modo de vida”.
De la misma manera precisa el Cardenal, “si Europa tuviera que ser menos cristiana nosotros seriamos como huérfanos depositarios de una experiencia de fe pero sin padres”.
¡Si Dios quiere que haya un Papa negro gracias les sean dadas!
Sensible a las críticas que pesan actualmente sobre el celibato sacerdotal y sobre todo hacia las desviaciones en este campo en el continente negro, Monseñor Turkson reacciona “. ¿Se trata de un problema exclusivamente africano o que concierne únicamente a los sacerdotes? NO. Esta cuestión de la fidelidad a un estado de vida se plantea también a las parejas casadas. El celibato supone una vida espiritual intensa, profunda y una disciplina de vida real, seria y abierta a la gracia. Este modo de vida no es natural. No puede ser vivido sin la ayuda de Dios. Esta es al menos mi experiencia personal. Como los otros sacerdotes yo no soy un ser sobre humano”.
El cardenal ganeano, que participo al Conclave que eligió a Benito XVI es interrogado a menudo sobre la elección de un futuro Papa negro. Su respuesta picara y sonriente no cambia” ¡Si Dios quiere ver un Papa negro, gracias le sean dadas!
Frederick Mounier, Roma
(1) Dos días después del nombramiento por el Papa del número dos de este dicasterio en la persona de Monseñor Mario Toso, salesiano, antiguo rector de La Universidad Salesiana de Roma y conocido experto de la Doctrina Social de la Iglesia.
Publicado en Le togolais. 08-09-10.
Traducción de Inmaculada Estremera, Hermana Misionera de Nuestra Señora de África.
