El bautizo del niño Mateo, por Fátima Valcárcel

7/03/2012 | Bitácora africana

El niño Mateo. Así es como llama mi amigo Luis a su pequeño. No sé si está bautizado. Nunca se lo he preguntado, la verdad, pero yo diría que no lo está. Hasta ahora tampoco me lo había planteado. Es curioso, hace 15 años que nos conocimos en Valencia y no recuerdo haber hablado de nuestras creencias… Solo sé que estuvo en Togo para rodar un documental precioso, Las luces de Defalé, y que quedó impresionado por el trabajo que desarrollaban allí las hermanas de una congregación católica.

El sábado 11 de febrero, apenas horas después de aterrizar en Bamako, fui invitada al bautizo de un niño Mateo maliense. Bueno, en este caso, Matthieu, su equivalente en francés -lengua oficial de este país subsahariano-.

Aquí la confesión religiosa, por lo general, tampoco importa. Me atrevería a decir que incluso menos que allí. En la casa del tío mayor del niño Matthieu se congregaron cientos de personas: cristianos católicos y cristianos protestantes, musulmanes, animistas… Familiares, amigos y vecinos del barrio acudieron a compartir la alegría de los padres y padrinos del recién nacido.

Las mujeres se concentraron en el patio. Los hombres se sentaron fuera, junto con los niños y algunas jóvenes que se animaron a bailar al contagioso ritmo del tamtan. Dentro, en el salón, el tío mayor del pequeño -jefe de familia, después de que su padre y el mayor de sus hermanos fallecieran- se encargaba de recibir a los más cercanos y de guardar un sitio para los que, como yo, veníamos de más lejos. Dentro y fuera, la maman -la esposa del jefe de familia, a pesar de que Matthieu tiene abuela materna- controlaba que hubiera comida y bebida para todos: carne guisada con patatas fritas, acompañada de pan y refrescos. La madre y la madrina estaban radiantes. También el padre y el padrino mostraban su elegancia.

En un momento dado, unos jóvenes trajeron unas bolsas enormes repletas de regalos. Sobre todo, de telas y jabones. Los paños son de distintas texturas y precios, pero la costumbre dice que no se debe regalar menos de tres piezas del mismo estampado. Las tres que se precisan para coser un conjunto de falda, camisa y fular, con el que las mujeres hacen maravillas al cubrir sus cabezas. Quienes tienen menos dinero compran jabón “Lagarto”: una, dos, tres unidades… Dependiendo de sus posibilidades. “Una pastilla puede costar 1.000 francos CFA”, me comenta el jefe de familia mientras añade: “Suelen ser las mujeres mayores las que lo regalan y aún así ya hacen un gran esfuerzo”. (Un euro se cambia por unos 655 francos de la Comunidad Financiera Africana, CFA.) Los hombres que acuden solos prefieren dar dinero. Les aburre ir de tiendas. Pero los francos CFA también empiezan a ser regalados por mujeres que consideran que unas telas, aunque sean buenas, no son suficiente.

Los griots (portadores de la tradición oral africana), presentes en todos los acontecimientos sociales de Malí, cantan y recitan sin, en principio, pedir nada a cambio. Una de las griots, la más atrevida, entró en el salón y le dedicó unas palabras al jefe de familia. Tenía una voz preciosa.

Durante la semana, familiares, amigos y vecinos seguirán desfilando por la casa para dar la enhorabuena y ofrecer sus presentes. Yo debería de acercarme uno de estos días. Con un aviso de menos de dos horas para arreglarme y todavía sin francos CFA en mi haber, no tuve tiempo de llevar nada, así que lo mejor será solucionarlo pronto. Si no, el peso de una nueva tarea pendiente recaerá sobre mi conciencia. Ya son varios los regalos que debo en España y no por ello he desistido de cumplir con la tradición algún día.

Original en Es la hora de África

Autor

  • Valcárcel, Fátima

    Fátima Valcárcel es ante todo periodista y enamorada de África y por este continente ha volcado su labor profesional y humana . Actualmente reside en Mali donde colabora con el periódico "Les Echos" y desde Bamako escribe su blog "Es la hora de África" que reproducimos en esta Bitácora Africana.
    Escribe en la Revista "Política Exterior" y en "FronteraD" , y en la Universidad de Valencia con la Cátedra UNESCO . organizó y dirigió seminarios sobre África

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