Ignace Bessi Dogbo, arzobispo de la archidiócesis católica de Abiyán, en Costa de Marfil, ha solicitado a la Iglesia del país que sea verdaderamente sinodal, saliendo de su zona de confort para llegar a las periferias.
El Arzobispo Dogbo exhortó a la Iglesia a dejar atrás su sentido de seguridad y aventurarse en lo que describió como “las periferias de los recaudadores de impuestos de hoy en día”.
El Arzobispo católico marfileño señaló que la misión de la Iglesia es estar más cerca de los marginados y vulnerables, aquellos que, según él, son a menudo ignorados por la sociedad:
“La Iglesia debe salir y llegar a las periferias donde los enfermos yacen abandonados, donde los pobres enfrentan un futuro incierto sin educación, comida o ropa”.
El arzobispo explicó que la estructura jerárquica de la Iglesia no tiene por objeto crear un sistema de dominio, sino coordinar esfuerzos para una atención pastoral eficaz en una Iglesia sinodal.
“En esta Iglesia, obispos, sacerdotes, diáconos, personas consagradas y laicos están llamados a caminar juntos, colaborar en comunión y comprometerse verdaderamente según sus vocaciones específicas […] Esta es la esencia de la sinodalidad”.
El arzobispo de Abiyán, oriundo de la diócesis católica de Yopougon, en Costa de Marfil, expresó su preocupación por la creciente influencia del materialismo en la Iglesia y advirtió contra el “cáncer del dinero”, que según él amenaza con corromper la misión de la Iglesia:
“Esta Iglesia no está gobernada por el dios del dinero, donde el espíritu de iniquidad reina y destruye todo a su paso”.
El arzobispo destacó la importancia de la unidad, la acción misionera y el compromiso de la Iglesia para servir a los pobres y marginados, manteniendo al mismo tiempo la integridad y la profundidad espiritual de su misión.
George Nwachukwu
Fuente: RECOWA
[CIDAF-UCM]