Donald Trump es el nuevo rostro de la supremacía blanca (Parte III)

6/10/2015 | Opinión

Sinceramente dudo que Trump quiera realmente ser presidente del país y someterse al arte del compromiso que es la política en el mundo real. Él sólo quiere ganar para alimentar su enorme ego. Pero, quién sabe cuántos crímenes de odio inspirará en el proceso. Cabe señalar que Trump es muy popular entre los dirigentes del grupo racista de Stormfront. Stormfront es el lugar principal donde la supremacía blanca y neonazis se encuentran y donde miembros registrados han sido relacionados con casi 100 asesinatos.

Supremacistas blancos se alinean detrás de Trump

Sé que este blog se tendría que ser sobre un padre feminista y los retos de criar a mi hija en un mundo patriarcal y no de política. Pero no hay mejor ejemplo del modelo fracasado de racista, sexista masculino que Donald J. Trump. Él es un artefacto del pasado que quiere arrastrar al país a ese pasado. Su retórica afecta directamente a la seguridad de mi familia. El pensamiento de alguien que odia a mi esposa e hija (o les ataca) porque quiere «hacer grande a Estados Unidos de nuevo», es aterrador. ¿Cuando fue grande la América de Trump? ¿En 2008, cuando comenzó la Gran Recesión? ¿En 1954, antes de la aprobación de Brown contra la Junta de Educación? ¿En 1860, antes del inicio de la Guerra Civil? América es mejor que Donald Trump, pero lucho contra él por la seguridad de mi familia.

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Trump Parte 2 – A esto se parece el fascismo

La trumpmania ha infectado todo, incluyendo mi blog para padres. Mi obra comparando la retórica de Trump a los supremacistas blancos que he estudiado durante casi 30 años resulto viral, llevando a Watching the Wheels a más de 100.000 vistas. Como se iba extendiendo, empecé a hacer entrevistas, incluso con estaciones de radio de habla española y un periódico en España. El miércoles, apareceré en Al Jazeera para hablar de Trump. El blog consiguió ser reposteado en Counterpunch y mi sección de comentarios ha adquirido una vida propia.

Prometo volver a escribir sobre mi hija esta semana. Ella está haciendo cosas increíbles. Pero yo quería aclarar mi argumento sobre el favorito del Partido republicano (GOP) y estrella del reality show. En primer lugar, permítanme ser claro. No creo que todos los seguidores de Trump sean racistas, aunque la gente en sus mítines ha estado cantando «¡White power!» y hablando de matar inmigrantes y al menos dos de sus seguidores han sido detenidos por la comisión de un crimen de odio contra un hombre latino en Boston. Para tomar prestado de Trump, algunos de sus seguidores, supongo, son buenas personas.

Está claro para los seguidores de Trump que el multimillonario favorito de Estados Unidos no puede hacer nada malo. Esto incluye la mentira. Trump «dice las cosas como son». Para aludir a Bill Clinton en su peor momento, depende de tu definición de lo que «es» es. Trump construye «hechos» que son completamente falsos, pero sus seguidores le siguen incondicionalmente. Hay una palabra de una f para definir eso: fascismo.

Trump es un demagogo en el verdadero sentido de la palabra. Podría salir a favor de comer bebés inmigrantes y sus Trumpies aplaudirían «¡Qué brillante idea!» Un estudio encontró que cuando presentas a un Trumpie un tema clásico liberal, pero le dices que Trump lo apoya, lo apoyarían sin dudar. Otra encuesta revelo que el 66% de sus partidarios piensan que Obama es un musulmán de Kenia.
Estos son los seguidores en el sentido más verdadero y ellos me recuerdan a los seguidores de la supremacía blanca que he pasado mi vida estudiando. Quieren un mundo blanco y negro y una solución fácil: construir un muro.

Pero de lo que realmente quería escribir era sobre las técnicas que Trump toma del Klan, de neonazis, de miembros de la Patriot Milicia y otros extremistas de la extrema derecha. Esta es la forma de crear un movimiento basado en el odio y el miedo.

Randy Blazak

Watching the Wheels

[Traducción, Jesús Esteibarlanda]

[Fundación Sur]

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