Un organismo de defensa de los derechos humanos de África, el grupo Raddho, ha declarado que el estado del África Occidental, Guinea Bissau, está llevando a cabo un “régimen de terror” después de los recientes ataques a los críticos con el ejército.
El día 1 de abril, el antiguo primer ministro, Francisco Jose Fadul, que también es líder de un grupo de la oposición, declaró que había sido apaleado por hombres de uniforme en su casa. El ataque sucedió tras el arresto, apaleamiento y tortura del abogado Pedro Infada.
“Raddho está muy preocupado por el régimen de terror que se ha instaurado en Guinea Bissau y por la violencia cometida contra Francisco Jose Fadul y Pedro Infada”, asegura la organización con sede en Dakar, Senegal, en un comunicado de prensa.
Raddho asegura que está preocupada por la salud del abogado, que sufre hemorragia interna. Infada actualmente se encuentra en la unidad de cuidados intensivos del principal hospital de Guinea Bissau, el Simao Mendez.
Ambos, Fadu e Infada, celebraron ruedas de prensa criticando al ejército antes de ser atacados.
Los dos miembros de la oposición política también hablaron públicamente el día 2, con Silvestre Alves, que representa el movimiento para la democracia, que se ha unido a diversas fuerzas de pequeños grupos que han decidido atacar al ejército por estas muestras de poder. “El gobierno parece incapaz de controlar al ejército”, declaró, “Esto es demasiado, nadie puede escapar a la brutalidad de los soldados, que quieren controlarlo todo”.
“Como el gobierno no ha sido capaz de hacer nada para detener este terror, debería dimitir como muestra de que no aprueba estos actos militares”. “Tenemos los teléfonos pinchados, los soldados pueden presentarse a cualquier hora en nuestras casas y agredirnos con total impunidad. Estamos viviendo en un estado de dictadura”, lamentó Alves.
El partido de Alves no está representado en el Parlamento, y otra figura de la oposición, Amine Sadd, expresó su convencimiento en que todo esto se está haciendo para asustar a los votantes, y que ninguno de los dos reciba ni un solo voto. “Lo comprendemos, quieren aterrorizarnos para evitar que presentemos nuestra candidatura a las elecciones”, explica.
Guinea Bissau, una antigua colonia portuguesa con una larga historia de golpes de estado, se encuentra en el limbo político desde el asesinato de su presidente, Joao Bernardo Vieira, el 2 de marzo de 2009. Un presidente interino dirige el país hasta las elecciones presidenciales, que se celebrarán el próximo 28 de junio.
(News 24, Suráfrica, 03-04-09)