El presidente congolés, Denis Sassou Nguesso, reelegido para la magistratura suprema el pasado 12 de julio, con el 78 % de los votos, ha formado un nuevo gobierno de 37 miembros, como el anterior, cuya composición ha presentado en público en día 15 de septiembre.
El nuevo gobierno, que cuenta con cinco mujeres, no estará dirigido por un primer ministro. Contará, sin embargo, con cinco ministros de Estado, de los cuales cuatro serán los coordinadores de cuatro vértices (infraestructuras, economía, soberanía y sociocultural) nombrados por el jefe de estado para una mayor eficacia de la acción gubernamental.
Isidore Mvouba será el encargado de Infraestructuras, la base que concierne a seis ministerios; Pierre Moussa, del vértice de Economía, que reagrupa a doce ministerios; Aimé Emmanuel Yoka, será el responsable de Soberanía, con siete ministerios, y Florent Tsiba, se ocupará de los seis ministerios que comprende el vértice Sociocultural.
El único ministro de Estado que no coordina un vértice es el de Desarrollo Industrial y de Promoción del Sector Privado, Rodolphe Adada, un antiguo jefe de la misión conjunta de la ONU y la Unión Africana en Sudán.
Nueve ministros abandonan el gobierno y permanecerán en sus cargos el de Exteriores, el de Interior y el de Minas. El ministro de agricultura, encargado de supervisar los cambios del acuerdo multimillonario de concesión de tierras a agricultores surafricanos, también conservará su puesto.
Sassou Nguesso, que ha estado en el poder del 5º país productor de petróleo de África, desde el golpe de estado de 1979, permanecerá otra legislatura de 7 años en el gobierno. La oposición boicoteó las elecciones y acusaron al gobierno de Nguesso de fraude ante los tribunales.
Congo Brazzaville depende tradicionalmente de los beneficios del petróleo, pero sus reservas están disminuyendo y el presidente quiere diversificar la economía, y reducir la dependencia de la importación de alimentos, modernizando su sector agrícola.
(Agence de Presse Africaine/IOL, 17-09-09)
