Demasiados dictadores, cerca del tesoro y del polvorín.

24/04/2017 | Editorial

20170424efs-web.mp3



Algunos de los líderes mundiales más poderosos por su control del poder, sus recursos y sus armas, sostienen la clave para la seguridad y bienestar de gran parte de la humanidad.

Nombres como: Trump, Putin, Erdogan, Kim Jong-un, Maduro, Mugabe, Kagame, Kabila, Museveni, Zuma, Salva Kiir, Bashir, etc., no solamente gobiernan como dictadores y acaparan los recursos del pueblo como jefes totalitarios en sus propios países, sino que suponen un peligro real para la paz y el bienestar, a nivel regional y global.

«El poder tiende a corromper y el poder absoluto corrompe absolutamente”. “Dinero es poder”, son aforismos de profesor Lord Acton, cuya actualidad es evidente. El acaparar dinero y poder, empobreciendo a la mayoría, es una terrible injusticia. Y todavía es más grave la situación donde los poderosos controlan los polvorines de armas. Provocan una sociedad cada día más desigual y más insegura.

Los líderes poderosos que sean íntegros al mismo tiempo, como: Mandela, Nyerere, Kofi Annan, son seres humanos muy extraordinarios, cuando deberían ser los normales.

Los cambios sociales de envergadura solo pueden brotar, como siempre, de los propios pueblos esclavizados. La movilización contra tales dictadores está en marcha en muchos paises de Africa y del mundo.

Las diferentes sociedades oprimidas llegan siempre a sensibilizarse y organizarse para hacer frente a las dictaduras y superarlas, con el coste y sufrimiento que semejantes liberaciones siempre conllevan, como ocurre en Sudáfrica, Zimbabue, Uganda, Ruanda, RDC, Mozambique, Sudan, Venezuela, Rusia, USA, etc.

Este proceso de liberación de las diferentes esclavitudes que nos impone el sistema capitalista neoliberal junto con los gobiernos, y las grandes multinacionales y bancos, también nos costará mucho sufrimiento y esfuerzo común, a las sociedades comprometidas por este cambio necesario.

El medio más eficaz y poderoso para realizar cualquier cambio social, político y económico, está siempre en manos del pueblo, pero exige pueblos y sociedades bien informadas, siempre comprometidas en colaboración, a través de las potentes Redes Sociales, Medios de comunicación y acciones conjuntas para potenciar Alternativas político-económicas, más humanas, sostenibles y solidarias.

Un mundo nuevo está renaciendo, gracias a una sociedad cada día más educada, motivada y comprometida para promover nuevas iniciativas socio-económicas de acuerdo con los derechos humanos, la equidad y el bien común.

Economistas de renombre mundial como Paul Krugman, Jeffrey Sachs y otros premios Nobel de economía en los últimos años, proponen un nuevo paradigma de política económica, que se podría llamar: Objetivos del Desarrollo Sostenible (ODS), que fue firmado en 2016 por 194 Naciones, en la ONU: Estos 17 objetivos del Desarrollo Sostenible son la Agenda más ambiciosa, realista y transformadora, que jamás se haya firmado en el mundo globalizado.

Según informa la Comisión Económica de las Naciones Unidas por África (ECA), una importante reunión, en colaboración con la Unión Africana, se celebrará en Addis Abeba del 16 al 19 de mayo 2017, bajo el lema: «Asegurando un desarrollo inclusivo y sostenible para todos»

Lo más importante sin embargo reside en su implementación. El grado de compromiso de los gobiernos y de los pueblos indicará la eficacia de este magnífico acuerdo. El compromiso de los gobiernos suele ser verbal, así que dependerá de la sociedad civil (nosotros), no nos hagamos ilusiones.

Los economistas más respetados advierten que esta es la mejor y la única alternativa a la dictadura de este sistema capitalista depredador, y la política irresponsable de líderes ineptos y de una sociedad todavía pasiva.

Los cambios sociales hacia una gobernanza responsable y un desarrollo sostenible para todos, requieren siempre un largo y penoso proceso de compromiso colaborativo y transformador, por parte de las bases sociales que sufren las injusticias y la privación.

Muchas sociedades de África, de Europa y del globo estamos llegando a tal punto de indignación, y de compromiso, a través de los nuevos Movimientos Sociales y Compromisos internacionales por los ODS, que el proceso de transformación social parece haber comenzado ya, aunque será largo y penoso.

Podemos elegir el mundo que queremos. Tenemos una gran responsabilidad

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster