Autor: Peter Kalu (*)
Entre el 7 y el 11 de noviembre de 2017, se celebró en la Universidad Pablo de Olavide de Sevilla la novena bienal de ASWAD (siglas de Asociación para el Estudio de la Diáspora Africana por el Mundo, en inglés), que reunió a más de 300 ponentes para abordar todo tipo de cuestiones políticas, sociales, culturales y artísticas relacionadas con la historia, presente y futuro de la emigración africana al resto del mundo. Peter Kalu, invitado como panelista, ha aceptado compartir con nosotros sus impresiones al descubrir la historia de los negros esclavizados en Sevilla y sobre el libro recién publicado ‘Hechos y Cosas de los Negros’, de Jesús Cosano. (*)
Me invitaron a Sevilla, en el marco de la novena edición de la Bienal ASWAD, junto con los escritores Yvette Edwards, Colin Grant, Irenosen Okoije, Jacob Ross y Leone Ross, para una conferencia titulada “Speaking Volumes Breaking Ground (Intervenciones Innovadoras) : Escritores Británicos de Color”. Nunca me había puesto a examinar con detalle las diferentes naturalezas de las poblaciones negras en los países europeos, así que visitar Sevilla supuso darme cuenta de mi ignorancia, tanto acerca de la antigua población inglesa negra como sobre la presencia africana en España. Comencé a buscar las respuestas en Sevilla. Lo que viene a continuación es un resumen de lo que he aprendido hasta ahora, todo muy indefinido por el momento.
La historia de Sevilla desde el siglo XV en adelante, hasta unos cuatrocientos años después, incluye la presencia y, por lo tanto, la transferencia de africanos esclavizados a suelo español. Esa presencia está por todas partes, es fácil encontrarla si sabes dónde mirar. La mayor parte de las “fachadas” de Sevilla, con las estatuas en los edificios y demás, se vanaglorian con orgullo de su Edad de Oro del Imperio, la de conquistadores y escritores de talento. “El sol nunca se pondrá en este Imperio“, una fanfarronada que nació originalmente en España y que fue más tarde adoptada por los ingleses. Muchos de los antiguos edificios de Sevilla son arrogantes, relucen con oro imperial.
¿Dónde, en medio de todo este oro, se encuentra la presencia negra? Casi todo lo que he aprendido sobre este punto ha sido gracias al historiador y escritor sevillano Jesús Cosano y su ingenioso libro “Los Invisibles: Hechos y Cosas de los Negros en Sevilla“, que reinscribe la presencia negra en Sevilla y constituye una información abundante, al tiempo que narra las vidas ficticias de figuras inspiradas en la evidencia histórica.
Sevilla, como Londres, es una ciudad fluvial. El río Guadalquivir es lo suficientemente profundo y ancho para que pueda atracar un corpulento crucero de cinco plantas como el Aegean Odyssey, registrado en Panamá y que vi mientras paseaba junto al Guadalquivir. El mismo río que una vez recibió las carracas de flotillas de barcos esclavistas, que subían con el hedor de las “piezas” que más tarde descargaban.
En el siglo XV estaba de moda entre la élite adinerada y la clase ascendiente de Sevilla, que incluía clérigos, artistas y mercaderes, el poseer esclavos africanos. Basándose en sus propias investigaciones, Cosano imagina a una de esas personas, Oliva, que trabaja como ayudante de un médico y a la que la población africana de Sevilla la va valorando cada vez más debido a sus conocimientos en medicina. Algunos documentos sugieren que los negreros y propietarios españoles, a menudo, compraban y revendían a africanos esclavizados y los trasladaban de lugar en lugar, incluso de colonia en colonia, y Cosano conjetura con la idea de que la comunidad esclavizada podría haberse apropiado conocimiento de botánica de las Indias Occidentales así como la de sus lugares africanos de origen. En un mapa antiguo de Sevilla, hay un trozo de tierra arable bautizado como “Huerta de la mulata”, donde Cosano especula que se hayan plantado hierbas medicinales, así como cultivos. También crea la figura de un africano esclavizado llamado Domenguillo, ayudante de un impresor y que llegó a ser un experto, no solo como tipógrafo, sino como lingüista. No es raro pensar que los esclavos africanos conocieran varios idiomas: el de su tierra natal, el español y cualquiera de las muchas otras lenguas que se utilizaban más frecuentemente en la época, que podían ser el portugués, el francés y el alemán.
Gente negra que viviera en Sevilla, vi poca durante mi visita. Una mujer agachada cerca del hotel, que vendía pañuelos. Un hombre en un colchón improvisado, durmiendo bajo un abrigo. Un hombre que tocaba el tambor en una plaza. Una pareja de vendedores en un puesto callejero. Un repartidor en bici. Desde el siglo XV en adelante, durante unos cuatrocientos años, hubo un desequilibrio de poder militar que provocó un declive violento de la población africana hacia las colonias y Europa. En nuestro actual siglo XXI existe un desequilibrio similar de poder (económico), que provoca un declive parecido y que atrae la nueva presencia de inmigrantes negros a Europa. Mi impresión general de Sevilla es que la gente ya estaba habituada a no considerar la ciudad ni el resto de España como el centro del universo. Parecen padecer menos que los ingleses aquello que el académico Paul Gilroy describía como “melancolía poscolonial“. Sin embargo, la invisibilidad de la presencia negra en Sevilla me hace ser prudente en este punto. Hasta que Sevilla reconozca públicamente los periodos menos gloriosos de su pasado, sospecho que seguirá sufriendo la misma amnesia autoengañosa.
* Peter Kalu es escritor y poeta y trabaja ocasionalmente como traductor de francés y español. Hijo de inmigrantes nigerianos y daneses, creció en la ciudad de Manchester. Comenzó a escribir en “Moss Side Write“, un grupo negro local de escritura, y hasta la fecha ha publicado ocho libros, dos radiodifusiones para la BBC y varias piezas de teatro. Su serie de novelas para adultos destacan la experiencia de los jóvenes negros británicos: “The Silent Striker” ( “El luchador silencioso”, de la cual se está rodando una película), “Being Me” (“Ser Yo”) y “Zombie XI”. Su última novela negra es “Little Jack Horner“. Su relato corto ‘The Keeper of Books” (“El Conservador de Libros”), que destila reflexiones sobre la participación británica en el comercio de esclavos, se publicará en 2018.
* Jesús Cosano Prieto ha trabajado en el área de la producción y la gestión de la cultura sevillana y lleva más de treinta años dedicado al estudio de la negritud. Jesús fue la persona que hizo posibles entre otros, los Encuentros del Son y el Flamenco y la creación de la Fundación Ceiba de cultura Afrohispanoamericana (Palabras de la Ceiba). Como artista plástico, ha organizado diversas exposiciones, todas relacionadas con el tema de la negritud, los negros y su huella cultural en la Península. Su último libro, “Hechos y Cosas de los Negros de Sevilla”, primer título de la serie ‘Los Invisibles’ de la Editorial Aconcagua, puede adquirirse escribiendo a la dirección infoaconcagualibros@gmail.com.
El presente artículo fue originalmente publicado en inglés en la página web de Peter Kalu. Traducción: Ángela Rodríguez Perea.
Original en : Afribuku