El abogado personal del presidente Ian Khama desempeñó, en la sombra, un papel crucial en la concesión de un valiosísimo terreno turístico a un multimillonario estadounidense relacionado con Wilderness Safari.
Promotive Investments, una empresa del multimillonario Paul Allen (cofundador de Microsoft), se vio favorecida por la administración Tawana y la Organización de Turismo de Botsuana (BTO) en la controvertida asignación de un terreno turístico muy lucrativo en el delta del Okavango.
Actualmente, la empresa arrendataria, Kwara, ha llevado el asunto ante los tribunales. Algunos documentos confidenciales y la investigación realizada por el periódico Botswana Guardian durante tres meses han sacado a la luz que Baedzi Baaitse Parks Tafa desempeñó una función muy compleja y polifacética en el proceso, en el que, aparentemente, su bufete de abogados, Collins Newman and Company, se encargaba del asesoramiento a BTO sobre cómo llevar a cabo la concesión. Más adelante, cambió de cargo y trabajó como asesor legal de Promotive Investments, para, finalmente, convertirse en uno de los directores de dicha empresa, tan solo dos meses después de que su socio en Collins Newman and Company, Laurence Khupe, otorgase la concesión a Promotive Investments sin licitación previa.
Khupe era presidente de un subcomité perteneciente al Comité de Inversiones de BTO. Una serie de documentos demuestran que el 22 de abril de 2009, durante una de las reuniones, Khupe asignó el área de administración denominada NG20 a la empresa del multimillonario. Esto sucedió sin necesidad de que se llevara a cabo un proceso de licitación, después de que la entonces Directora Ejecutiva, Myra Sekgororoan, solicitara la asignación directa de la concesión a una empresa con la que Tafa terminó por mantener una relación profesional.
La búsqueda que Botswana Guardian realizó en relación con estas empresas terminó por revelar que 65 días después de producirse la concesión, tanto Tafa como Keith Vincent, de Wilderness Safari, se convirtieron en directores en Promotive Investments. Kwara, subsidiaria de Kwando Safari, pertenece a John Mynhardt, uno de los empresarios más ricos, y se extiende a lo largo de 175 000 hectáreas en el corazón del prístino delta del Okavango.
La concesión es una empresa altamente lucrativa a pesar de su exorbitante renta y obligaciones fiscales anuales. Es comprensible el porqué de la reacción de Kwara, desafiante ante BTO y la administración Tawana por haber asignado la valiosísima tierra de forma directa a Promotive. Collins Newman and Company representa a BTO.
Khupe solicitó que quedara constancia de que su socio, Tafa, era asesor de Promotive Investments, pero no declaró de forma explícita durante la misma reunión que su socio tuviese intención de convertirse en director de la empresa norteamericana. Al ser contactados para que hiciesen declaraciones al respecto, Tafa y Khupe rehusaron intervenir. El prestigioso bufete de abogados también asesora legalmente al partido político en el poder, el Partido Democrático de Botsuana (BDP), y a Wilderness Safari. Wilderness está asociada con Promotive Investments por su sociedad matriz, Vulcan. Vulcan posee Abu Camp en el delta del Okavango. Los documentos revelan datos impactantes que demuestran hasta qué punto la lucrativa industria turística de Botsuana la controlan inversores a gran escala vinculados con simpatizantes del BDP.
El turismo supone una grandísima aportación para la economía de Botsuana, solo por detrás de la minería. El sector turístico contribuyó con un 12% al PIB en 2012, y se prevé que aumente de forma exponencial en el 2013, de acuerdo con los estudios de la agencia de estadística del país africano. Allen ha expandido notablemente su influencia en el sector a través de Vulcan.
Su empresa, Promotive Investments, subsidiaria de Old World Properties, mantiene vínculos con Wilderness Safari y, según lo que Botswana Guardian ha podido ver en diversos documentos, prefirió que Wilderness Safari administrara el área NG20 en nombre del magnate norteamericano. Actualmente, Tafa ocupa el cargo de Presidente de la Junta Directiva de Wilderness Safari, en la que Khama dispone de una participación del 5% en Linyati, una concesión otorgada a Wilderness Safari.
Puede que sea incluso más importante la nueva función que ha adquirido BTO en el control de los principales terrenos turísticos. Ya en 2008 se urdió un plan para usurpar antiguos terrenos reservados para el turismo. De acuerdo con las fuentes consultadas por el periódico, el 3 de abril de 2009 el Departamento de Turismo diseñó un elaboradísimo plan para asumir el control de todas las áreas administrativas de los distintos territorios.
El secretario del Ministerio de medio ambiente, turismo y vida salvaje anunció a las autoridades de los terrenos que traspasaran al BTO las concesiones que fueran a terminar para que la propia organización pudiera asignar directamente las concesiones a los inversores que cumplieran con las tendencias de mercado y condiciones adecuadas. Se informó a las autoridades que dieran a este asunto la importancia de una directiva urgente. Sin embargo, según los expertos, la motivación del Departamento de Turismo vino de un extraño intento por parte de Allen de pagar, en misteriosas condiciones, una suma millonaria de pulas al gobierno por el terreno.
Promotive admite que no cuenta con experiencia en hostelería y que dependerá de Wilderness Safari para la administración de la provechosa concesión en el corazón del delta del Okavango Delta.
INCENTIVO O SOBORNO
Antes de que Khupe pudiera conceder el área NG20 a Promotive Investments sin necesidad de una licitación, Vulcan ya había hipnotizado discretamente a Sekgororoane y a miembros del gobierno.
El Director Ejecutivo de Vulcan, William McGrath, en una carta escrita en 2009 con la intención de motivar la concesión directa de NG20 a Promotive, describió a Allen como un visionario y verdadero conservador. Afirmó que el multimillonario tenía la visión de convertir la concesión en un destino de ecoturismo a varios niveles, dirigido a los extractos medio y alto del mercado turístico internacional. No obstante, algunos de los antiguos guardaespaldas de Allen no compartirían las afirmaciones de McGrath. Un grupo de ellos han llevado a Allen ante los tribunales de Seattle alegando que los engañó para traficar con huesos de jirafa.
En otra carta, esta vez confidencial y dirigida de forma imprecisa al Gobierno de Botsuana en general, McGrath realizó la sorprendente promesa de «pagar al gobierno el importe de 45 millones de pulas en metálico» si Allen conseguía la tan ansiada concesión. Aquellos que entienden la economía de las adquisiciones empresariales defienden que no había nada malo en la oferta del rico estadounidense. «No era un soborno. Promotive solo estaba incentivándoles. En el mundo de los negocios ocurre constantemente», declaró un empresario, que tenía conocimiento acerca de la concesión, con una sonrisa afectada. El observador determine que los 45 millones de pulas formaban parte de la propuesta de alquiler del lucrativo territorio.
Pero otros defenderán que el «incentivo» de McGrath, realizado el 10 de febrero de 2009, fue crucial en tanto que cambió la postura del gobierno y ayudó a influenciar en la posesión de tierras en el sector turístico.
El Secretario permanente adjunto en el Ministerio Territorial, Gaolebe Lekula, aparentemente inspirado por la atractivísima propuesta de McGrath’s, cambió de postura y urgió a la administración Tawana que remitiese a la BTO todos los terrenos cuyas concesiones estuviesen a punto de expirar para que la propia organización decidiera su renovarlas o anunciarlas. Y así es como Mynhardt perdió su concesión en favor del poderoso Allen, quien se cree que se gana la vida en Mónaco, un imán para las grandes fortunas gracias a su liberal régimen fiscal. Aquellos más cercanos a la disputada concesión admiten que la historia de ese terreno tan lucrativo se remonta a varios años atrás.
Dos años antes de que expirara, los expertos Sekgororoane y el entonces Ministro de medio ambiente Kitso Mokaila aconsejaron de forma «poco acertada» a Mynhardt que no adquiriera Kwara de Mark Kyriachao por unos 35 millones de pulas. Kyriachao, de Bird Safari, ya había denegado inicialmente la oferta de Tafa de 6 millones de dólares (unos 48 millones de pulas) el 17 de Julio de 2008.
CONFLICTO DE INTERESES
La interrelación de los puestos de dirección ha sido objeto de debate durante años. Quizás, para los estudiosos de la gobernanza empresarial, fuera más fascinante la aparente relación «tripartita» de Tafa con Promotive Investments, BTO y Wilderness Safari. Con Promotive y Vulcan su relación se remonta a marzo de 2007. Tafa y Khupe no contestaron a las preguntas que se dirigieron a ellos de forma individual, ya que su abogada, Dineo Makati-Mpho, se quejó de que «muchas, sino todas» las preguntas remitidas por el periódico Botswana Guardian estaban relacionadas con el asunto NG20 y podrían influir en los resultados de los procesos de los tribunales. Con cuidado de no incurrir en desacato al tribunal Botswana Guardian solicitó repetidamente, durante unas ocho semanas, a Tafa y Khupe que verificaran la información que ya estaba publicada, como por ejemplo el cargo de directivo de Tafa en Promotive o la presidencia en Wilderness Safari.
Los documentos suministrados por Botswana Guardian del Registro Mercantil explicitan que Tafa, en un determinado momento, fue director de Promotive. También recogen que la dirección de Promotive cambió de Kabelo Abueng y finalmente pasó a manos de Vincent, Keshavjee, Ferina Illyana y Tafa el 26 de junio de 2009. Otras nombres conocidos son los de Vincent Seretse Tinah, de RPC Data, y Matone Joseph Malope.
Khupe ignoró las preguntas de este diario en septiembre sobre si era consciente de que su socio mantenía una relación profesional con una empresa que había conseguido una concesión de la BTO. En cambio, la abogada de Tafa y Khupe amenazó con una intercepción urgente si se publicaba algún artículo sobre sus clientes.
PAUL, EL FILÁNTROPO
Los empleados de la recepción en Vulcan se caracterizan por su cumplimiento estricto de las órdenes. Vulcan cuenta con un portfolio diversificado con una mayor tendencia hacia la mejora de los avances tecnológicos, según su página web. La empresa trabaja en temas de deportes, en museos, en desarrollar los esfuerzos filantrópicos de Allen, en asuntos inmobiliarios y en el campo de la ciencia. Vulcan Capital es la sección de Vulcan Incorporated dedicada a las inversiones y administra las propiedades y otros bienes de Allen. Una fuente cercana a Promotive Investments afirmó que la empresa está comprometida con el bienestar en Botsuana y que tomó sus decisiones según el «consejo profesional de acuerdo con las legislación vigente». Comentó que Vulcan y Promotive consideraban que el valor de libre Mercado de NG20 oscilaría entre 45 millones de pulas.
¿QUIÉN ES PAUL ALLEN?
La revista Forbes incluyó a Allen en su lista de las 26 personas más ricas del mundo en septiembre de 2013. Allen cuenta con una fortuna neta de 15.800 millones de dólares, igual al PIB de Botsuana (130 mil millones de pulas). Posee Old World Properties, a la que a su vez pertenecen Juno Properties en Luxembourg Sarl. Es accionista único de Quirinal Properties, que posee Juno. Quirinal Properties Sarl es la sociedad matriz de Promotive Investments. Se ignoró el primer cuestionario que se envió a Vulcan, el 17 de septiembre. Tras llamar repetidamente y enviar numerosos correos electrónicos, James Larsen, de Vulcan Corporate Communications, se comprometió a ponerse en contacto con Botswana Guardian, pero desde entonces ha ignorado otras muchas llamadas y correos durante las últimas semanas.
Joel Konopo y Justice Kavahematui
Botswana Guardian