La crítica viene a raíz del nombramiento del ex ministro ugandés de Asuntos Exteriores como Presidente de la Asamblea Nacional.
La presdidencia de la Asamblea General de las Naciones Unidas fue atribuido el miércoles 11 de junio a Uganda después de una preselección por el grupo regional de los Estados de África. En realidad, era el turno de los Estados de este continente para nombrar cualquier país, bajo un sistema de rotación. Así Sam Kutesa, el ex ministro de Relaciones Exteriores de Uganda, fue elegido por aclamación sin votación, antes de ser felicitado por el secretario general Ban Ki-moon.
El Sr. Kutesa tiene una amplia experiencia: abogado , parlametario , Ministro de Finanzas y de Asuntos Exteriores. Le deseo mucho éxito en sus importantes responsabilidades «, declaró Ban Ki-moon, según informó la agencia AFP. Por su parte, el Sr. Kutesa aseguró que tenía la intención de luchar contra la pobreza y el hambre como prioridad en su mandato.
homofobia y corrupción
Pero lo que llamaba la atención a los periodistas eran las acusaciones de homofobia y de corrupción que se le hacen a Kutesa . De hecho, en 2011, fue presionado para dejar su puesto como jefe de la diplomacia de Uganda, acusado de malversación de fondos. «Yo nunca he sido condenado por corrupción», recordó a los periodistas en la ONU.
A continuación, la prensa abordó el tema de la polémica ley, que entró en vigor en febrero en el país, que tipifica como delito la «promoción» de la homosexualidad y hace obligatoria la denuncia de los homosexuales. Más de 13.000 personas firmaron una petición para que los Estados Unidos retire la visa del Sr. Kutesa por su apoyo a la ley.
Ahora el nombramiento su nombramiento a la presidenciaa de la Asamblea General es objeto de controversia. Human Rights Campaign una organización que lucha por los derechos de homo-, bi y transexuales, describió su presidencia como una mancha en los esfuerzos de la ONU para proteger los derechos de todas las personas.»
El Presidente de la Asamblea General de las Naciones Unidas, elegido por un año, aseguró que él no era «homofóbo». En tanto i los homosexuales «permanezcan en su vida privada, no tengo ningún problema».
La ley en cuestión provocó una oleada de condenas en todo el mundo. El Secretario de Estado de EE.UU., John Kerry, la comparó con las leyes de la Alemania nazi o el régimen del apartheid en Sudáfrica. Por consiguiente, anunció que Estados Unidos revisaría su cooperación con Kampala.
Fuente Afrik Com Fundación Sur