Control de los minerales: África en la trampa chino-americana

8/03/2010 | Opinión

En un encuentro con la prensa extranjera en Washington, Johnnie Carson, subsecretario de Estado americano para Asuntos africanos, ha reconocido que “los chinos ven enormes posibilidades en África”. El profesor Omar Aktouf que enseña en HEC Montreal, en Canadá, va más lejos en su análisis al afirmar que “Occidente es hostil a la penetración china en África”. Precisa incluso que se asiste a una “primera guerra chino-americana” en África. Un enfrentamiento que no sería provechoso de ningún modo para los Estados africanos. Un eventual vencedor consagraría el regreso de “las dictaduras”.

El subsecretario de Estado americano acaba de efectuar un viaje por África; viaje destinado a percatarse de la situación que prevalece en Níger, Costa de Marfil y Somalia. Pero frente a la prensa extranjera se ha detenido también en las iniciativas cada vez más numerosas e importantes de China en África.

El hombre de Estado americano ha reconocido que “China buscaba de manera selectiva la adquisición de derechos de explotación de hidrocarburos y de otros recursos naturales para responder a las necesidades creadas por su crecimiento económico”. Ha proseguido haciendo notar que “China trata igualmente de encontrar nuevos mercados para sus exportaciones. En este contexto, África es un continente en el que los chinos ven enormes posibilidades”.

A la vez que afirma que corresponde a los africanos gestionar atentamente y con talento sus propias relaciones económicas y comerciales con China, el alto responsable americano ha insistido en la existencia de instituciones democráticas “para que las voces de las poblaciones puedan hacerse oír en cuanto a las consecuencias de estas relaciones con China”. Palabras que prueban claramente que los EEUU no permanecen desatentos a cuanto China emprende en África.

GUERRA CHINO-AMERICANA

Por su parte, el profesor Omar Aktouf, de la Universidad HEC de Montreal, Canadá, en una entrevista concedida al periódico “Les Afriques”, habla igualmente de la penetración china en África. Evoca la estrategia china en África consistente en no jugar el mismo juego que las multinacionales americanas o europeas y lo que puede aportar a las economías locales. Desmenuza además las reacciones hostiles que esta penetración suscita en occidente para invitar a los Estados africanos a ser intervinientes económicos.

Según el profesor O. Aktouf estamos asistiendo ahora a una “primera guerra chino-americana en África”. Y precisa: “China está hoy a las puertas de Europa y amenaza los intereses americanos en Medio-Oriente. Sudán no está lejos del canal de Suez, lo que es intolerable para Washington”.

A la cuestión de saber si los conflictos desencadenados en ciertas regiones de África están ligados a esta orientación asiática, responde: “Tienen ustedes Darfur, el conflicto en Zimbabue. El pobre Mugabe ha cometido el pecado de decir al los blancos que dejen las tierras y se ha convertido en el mayor tirano del mundo. No lo era antes. Toda la región de los Grandes Lagos, Ruanda, Burundi, la RDC… está en el objetivo. Los franceses, americanos y otras potencias quieren limitar la intrusión de China, que juega la carta africana a fondo y asusta a las potencias occidentales”.

¿Cómo explicar esta guerra que todavía no dice su nombre? “Que tenga usted petróleo, gas, uranio, las oportunidades son las mismas para todos”, ha declarado. Por otra parte, si creemos a algunos analistas, China adelantaría a EEUU en 2020 como potencia económica. Frente a esta realidad, sería difícil impedir que China alcance este objetivo. Lo mejor que puede hacerse es ralentizar su crecimiento económico, privarla de los minerales, dado que quien controle los minerales controla la economía mundial.

Además, se sabe que los EEUU tienen una deuda de más de 300.000 millones de dólares con China. ¿Qué sucedería si esta guerra tuviera lugar efectivamente? Algunos dicen que China dispone hoy de grandes medios financieros que pueden ofrecer a África. Algo que occidente ya no dispone. Las razones están dadas para que los americanos se enfrenten a los chinos en África y para que los países occidentales sean hostiles a la intrusión china en África. Pero, una cosa más: la economía financiera ha mostrado sus límites con esta crisis que ha afectado a todos los países y China y occidente necesitan materias primas para sostener su economía. Mientras que África, que posee todas estas riquezas todavía inexploradas, a saber, oro, coltan, diamantes, casiterita, níquel…, necesita dinero para su reconstrucción. Más todavía, no tiene la capacidad de proteger esas riquezas.

PARTENARIADO CON LA RDC

Cuando se posee uranio, cobalto, coltan, casiterita, petróleo, la RDC dispone de oportunidades que han atraído China a establecer una asociación bajo el signo “ganador-ganador” con la RDC. Un partenariado que ha levantado varias reacciones en el bloque occidental. Si bien las razones aducidas podrían ser plausibles en cuanto a la deuda de la RDC, las verdaderas causas son las avanzadas por el profesor universitario.

El profesor Omar Aktouf está de acuerdo con la opción realizada por China: “China, evidentemente, tiene intereses por comenzar con un país como la RDC. El asunto está en saber realizar una división internacional del trabajo, una especie de complementariedad entre países, en la que cada uno tendría su función”. Es aquí cuando interpela a los gobiernos africanos: “Es preciso que el Estado sea un interviniente económico. Lo que falta en los países del Tercer Mundo es que el Estado no ejerce su verdadera función, concretamente en materia de educación. Es gracias a la educación como China se encuentra donde está actualmente”.

Por lo demás, como en la época de la guerra fría, África está en el centro de intereses divergentes de las grandes potencias. En esta primera guerra “chino-americana”, la RDC corre el peligro de ser la gran perdedora si las instancias dirigentes no aprecian en su justa medida el valor de las grandes mutaciones político-económicas que se observan especialmente en la región de los Grandes Lagos.

La solución pasa por el buen gobierno, como lo ha subrayado bien el subsecretario de Estado americano. Pero, también, tal y como lo ha indicado el profesor Aktouf, por la existencia de instituciones fuertes que permitan al Estado ejercer su función de interviniente económico. Un enfrentamiento entre China y occidente por el control de los minerales no es deseable. Las elites africanas deben mostrarse a la altura de sus responsabilidades y compaginar correctamente el interés de su nación, tanto en sus relaciones con China como con América y Europa. Ya que, si bien China dispone de dinero, los EEUU disponen de una temible fuerza militar y de una capacidad dañina capaz de desbaratar algunos pronósticos

(Publicado en Le Potentiel. República Democrática del Congo, el 03-03-2010)

Traducción de Ramón Arozarena.

Autor

Más artículos de Administrador-Webmaster