El Ejército de Burundi pidió hoy cohesión en sus filas y el regreso a las unidades de los militares en fuga desde el fallido golpe de Estado contra el presidente Pierre Nkurunziza, el pasado día 13. La nota de prensa, que salió de una reunión que mantuvieron el nuevo ministro de Defensa, Emmanuel Ntahonvukiye, y el jefe de Estado Mayor del Ejército, Primke Niyongabo, junto con varios oficiales, indica que «La supervivencia de Burundi como nación se basa en la cohesión de la FND (Fuerza de Defensa Nacional-Ejército)». Además, alerta que en caso contrario, tal contexto provocaría una situación similar a la de Somalia que sería inaceptable. Durante la reunión, agrega el comunicado, se discutieron temas de actualidad y la crisis política que enfrenta la nación.
El portavoz militar, coronel Gaspard Baratuza, declaró a una agencia de noticias francesa que “Los oficiales presentes insistieron en la cohesión del Ejército de Burundi para que nadie escape de este deber”.
El presidente del país, Pierre Nkurunziza, ha culpado a los medios de comunicación, nacionales e internacionales, de “tratar de difundir informaciones capaces de sembrar el odio y la división entre los burundeses, de desacreditar a Burundi y de alentar movimientos de insurrección”. Estas declaraciones han ido acompañadas del cierre de varias radios privadas ubicadas en Bujumbura. Desde la Unión Europea, el Gobierno de Bélgica ha amenazado con cortar las ayudas, que en 2013 ascendieron a más de 47 millones de euros, si el presidente no desiste en sus pretensiones electorales.
Ayer, jueves día 21, una manifestación de mujeres que protestaba contra la presentación de Nkurunziza a un tercer mandato presidencial fue dispersada con gases lacrimógenos por las fuerzas de seguridad. En otra manifestación que tenía lugar en Musaga, sudeste de la capital, se informaba de la muerte de uno de los manifestantes a manos de la policía. De ser realidad esta información ya serían más de una veintena las personas muertas en las protestas contra la presentación de Nkurunziza a las presidenciales. Los refugiados en los países vecinos podrían ser más de cien mil.
Fuente: Prensa Latina-MISNA-@rib-Fundación Sur