No menos de 25 elecciones presidenciales se llevarán a cabo en 2015 y 2016 en el continente africano. Pero las elecciones no son necesariamente sinónimo de alternancia. De hecho, muchos jefes de Estado podrían mantenerse en el poder a pesar de las leyes sobre los límites de los mandatos.
Las elecciones presidenciales y legislativas en Nigeria, prevista inicialmente para el 14 de febrero, se posponen al 28 de marzo, a petición del partido de Goodluck Jonathan, el presidente saliente, candidato a su sucesión.
2015-2016, dos años cruciales para África, donde se anuncian 25 elecciones presidenciales, además de docenas de elecciones legislativas y locales. La mitad de los líderes estatales del continente podría dejar su lugar a causa de un cambio democrático. Esto implica que se respete el principio de limitación a dos mandatos, vigentes en la mayoría de las constituciones africanas. Pero esto está lejos de ser así.
¡No toque mi constitución!
En las 20 antiguas colonias del imperio colonial francés, los textos se inspiran en gran medida en la Constitución de 1958 que fueron escritos para favorecer el predominio de un solo partido. Desde los años 90, el viento de la democracia que se ha ido extendiendo por África con las conferencias nacionales, la limitación a dos períodos de cinco o siete años se ha impuesto en casi todos los países. En teoría, porque en la realidad, varios jefes de estado están resistiendo y caminan tras las huellas del gabonés, Omar Bongo, que totalizó 41 años de presidencia. Son, actualmente, cuatro para poder superar ese récord de longevidad: Teodoro Obiang (Guinea Ecuatorial) y José Eduardo Dos Santos (Angola), ambos de 72 años y llegaron al poder en 1979, ósea con 35 años, Paul Biya de Camerún que en pocos días celebra sus 82 años y sus 32 de presidencia e Idriss Deby, del Chad que el próximo año entrará en un quinto mandato. El burquinés, Blaise Compaoré, que gobernó su país durante 27 años, e intentó gobernar un quinto mandato con unos retoques constitucionales, pero fue derrocado el 31 de octubre por un levantamiento popular. Refugiado en Costa de Marfil, donde Ouattara le ha ofrecido hospitalidad, él no desiste de estar de nuevo al mando, aunque sea a través de uno de sus compinches.
Francia tendrá que enfrentarse, en los próximos dos años, a situaciones políticas muy complicadas. Será curioso ver a François Hollande trabajando para poner en práctica la limitación del número de mandatos y garantizar «elecciones libres y transparentes» en Malí y en Centroáfrica.
Nigeria
Codo a codo en las encuestas con Muhammadu Buhari, su principal oponente, Goodluck Jonathan, está, a unas semanas antes de las elecciones, preparado para obtener el aplazamiento de las elecciones presidenciales. Sobre la base de las operaciones militares contra Boko Haram que duran ya al menos cinco años. Jonathan, que dispone del mando del estado para financiar su campaña, es sospechoso de intentar estrangular financieramente a su oponente
Congo Brazzaville
Denis Sassou Nguesso, de 71 años, debe, de acuerdo con la constitución de su país, dejar el poder en 2016, después de dos mandatos consecutivos. El presidente que gobernó el país desde 1979 hasta 1992, antes de volver al poder por la fuerza en 1997, lleva en la presidencia un total de 32 años. No hay indicios de que aceptará su retiro.
Chad
Idriss Deby, de 62 años, también tiene la intención de volver a presentarse. Se las arregló para hacerse indispensable en Malí, donde su ejército ha echado una mano al ejército francés contra los islamistas. Es una apuesta segura, a cambio de un gran servicio a la causa de la lucha contra el terrorismo, la comunidad internacional (un término que se refiere principalmente a las potencias occidentales en el Consejo de Seguridad de la ONU) no será muy puntillosa acerca de la revisión del régimen democrático en el Chad.
Togo
Faure Gnassingbé, elegido en 2005 tras un golpe de Estado constitucional, tiene previsto anunciar su candidatura para un tercer mandato de cinco años. Bébé Gnass, su apodo en el país, sigue los pasos de su padre Eyadema, presidente durante treinta y ocho años. Haciendo un total para la dinastía Gnassingbé, de cuarenta y ocho años de gobierno ininterrumpido.
Gabón
La misma situación en este país con Bongo. Sucediendo en 2009 a Omar, su padre, que había mantenido las riendas de su país durante 41 años, Ali intentará repetir un golpe de estado electoral para mantenerse en el cargo.
Costa de Marfil
Alassane Ouattara asumió el poder en abril de 2011 después del bombardeo por parte del ejército francés de la residencia donde Gbagbo se había refugiado, volverá delante de los votantes en octubre de 2015. Hubiera podido presentarse en 2010 gracias a una decisión de Gbagbo que le autorizó, de forma excepcional y sólo para esta votación. Según la Constitución, un candidato a la presidencia debe ser de origen marfileño y nunca haber adquirido otra nacionalidad. Lo cual no es el caso de Ouattara que sirvió en el FMI en los años 80 bajo el Alto Volta (la actual Burkina Faso). El Presidente del Consejo Constitucional, un abogado muy exigente, ha presentado su dimisión y ha sido sustituido por alguien cercano a Ouattara.
Benín
Es probable que Yayi Boni desaparezca en 2016 después de obtener sólidas garantías sobre su futuro y el de su familia.
Yibuti
Este es otro de los países donde, Ismail Omar Guelleh, que en 2016 llevará ya 17 años en el poder, ha cambiado la Constitución para presentarse a otro mandato más.
En Guinea Conakry y en Níger, los “salientes” pueden volver a presentarse sin salir de las leyes constitucionales. Lo que, desde luego, no garantizará elecciones pacíficas.
República Democrática del Congo
En la antigua colonia belga, Joseph Kabila completará su segundo y último mandato en noviembre de 2016. Tendrá entonces 44 años y no está listo para retirarse.
Uganda
En esta antigua colonia británica, que ha seguido la dictadura de Amin Dada, Yoweri Museveni celebrará sus treinta años de presidencia en 2016. A los 70 años, tiene la intención de volver a presentarse.
Sudán
Omar al-Bashir, en el poder desde 1989, se presentará ante los electores en abril de 2015. Mientras que se está a punto de emitir la orden de detención dictada contra él por el Tribunal Penal Internacional. El tribunal acaba de suspender la «investigación» que llevó a cabo, durante casi diez años, por los crímenes cometidos en Darfur.
Gambia
En esta antigua colonia británica donde el árabe ha reemplazado al inglés como idioma oficial, Yahya Jammeh, llegó al poder por un golpe de estado en 1996, debería ser reelegido para un quinto mandato en 2016. Tendrá entonces, 51 años.
Las presidenciales están, también, previstas en 2015 y 2016 en otros países africanos como Tanzania, Zambia, Ghana y Burundi. En Camerún, los votantes tendrán que esperar para votar al 2018. Paul Biya tendrá entonces 85 años y no ha manifestado su intención de no solicitar un nuevo mandato de siete años, lo que le permitiría romper el récord de Omar Bongo.
[Fuente: mondafrique.com-Fundación Sur]