El conflicto entre la RSF y el ejército sudanés, comenzado en abril de 2023, ha provocado miles de muertes, destrucción de infraestructuras y una grave crisis económica. La violencia también ha forzado el desplazamiento de millones de personas, muchas de las cuales se han visto obligadas a buscar refugio en países vecinos como Chad y Sudán del Sur.
El reciente ataque de las Fuerzas de Apoyo Rápido (RSF) en la aldea de Wad al-Noura, ubicada en el estado de Gezira, en Sudán, se produjo en dos oleadas en las que fue utilizada artillería pesada. Este trágico suceso ha resultado en la muerte de hasta 100 personas, según activistas locales, entre las cuales se encontraban mujeres, niños y ancianos. Mini Arko Minawi, gobernador de la provincia de Darfur, confirmó la masacre mediante un vídeo en las redes sociales.
Aunque las RSF admitieron haber atacado las bases del ejército y sus milicias aliadas en la zona, no reconoció bajas civiles. Los Comités de Resistencia de Wad Madani han divulgado imágenes de una «fosa común» en la plaza pública, indicando que el ejército sudanés no respondió a las peticiones de ayuda de los aldeanos. La comunidad internacional, incluida la ONU, ha condenado el ataque y ha solicitado una investigación completa que consiga una rendición de cuentas.
Fuente: Al Jazeera
[Traducción y edición, Bruno Rodríguez]
[CIDAF-UCM]
