El expresidente de Mozambique Joachim Chissano era esperado hoy jueves 26 de abril en Antananarivo para mediar en la crisis política de Madagascar.

La Comunidad del África Meridional para el Desarrollo (SADC), integrada por 15 naciones, decidió enviar urgentemente al Sr. Chissano al estado insular que ha estado bajo los violentos enfrentamientos entre partidarios de la oposición y las fuerzas de seguridad.

La SADC tomó la decisión en su cumbre en Luanda, Angola el martes 24 de abril.

La misión de Joachim Chissano implica facilitar un diálogo nacional para calmar las tensiones políticas y llegar a un consenso sobre las reformas electorales.

Mientras tanto, en Madagascar, los diplomáticos lucharon para reunirse con los diversos actores políticos.

Algunos enviados mantuvieron conversaciones a puerta cerrada con el presidente Hery Rajaonarimampianina en la Casa de Estado de Iavoloha el martes por la noche.

Sin embargo, la situación sigue siendo tensa con más manifestaciones de los partidarios de la oposición planeadas en diversas regiones a partir del jueves.

Unos 73 "diputados por el cambio" de la oposición están liderando a sus seguidores en la agitación por las reformas y la destitución del presidente Rajaonarimampianina del poder.

También planeaban iniciar acciones legales contra el gobierno por la interrupción violenta de las manifestaciones y concentraciones de la oposición.

Amnistía Internacional ha pedido a las autoridades malgaches que investiguen la reciente represión mortal en la capital.

"Madagascar tiene la obligación legal bajo las leyes internacionales de derechos humanos de respetar, proteger, promover y cumplir el derecho de todos a la vida", declaró el grupo de presión.

En el centro de la crisis de Madagascar se encuentran las leyes electorales propuestas que la oposición cree que estaban destinadas a bloquear a algunos candidatos de la próxima carrera presidencial.

Fuente: The East African

[Fundación Sur]

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