Hugo Chávez, hizo avances diplomáticos en África, el día 27 de septiembre, en una cumbre de líderes de Latinoamérica y África, celebrada en Venezuela, en la que el presidente del país anfitrión ofreció su ayuda a África en cuanto a proyectos petrolíferos, minería y ayuda financiera.
El presidente de Venezuela y de Libia, Muammar Gadafi, presidieron la reunión de alrededor de 30 líderes de los dos continentes, de dos días de duración, en la que acordaron reforzar los lazos Sur-Sur, en lo que ha supuesto la primera visita del líder libio a Latinoamérica.
“Con esta cumbre, comienza una nueva era en la unidad de América del Sur y África”, declaró Chávez.
Venezuela firmó acuerdos de cooperación en materia de energía con Mauritania y Níger, y Chávez dijo que a su gobierno le gustaría ayudar a construir una refinería en o cerca de Mauritania. Añadió que espera firmar otros acuerdos de energía con Sudán.
Venezuela también planea entrar a formar parte de las compañías mineras que operan en Mali, Níger y Mauritania, Chávez aseguró que “vamos a ver los resultados, porque las dos regiones juntas tienen un enorme potencial económico”.
Amplia variedad de asuntos abordados
Siete líderes de América del Sur firmaron un acuerdo para crear un banco de desarrollo regional, con un capital inicial de 20.000 millones de dólares, y Chávez se ofreció a ayudar a crear el Banco Sur-Sur, con los bancos africanos en un futuro.
No está claro cuánta inversión y ayuda tiene previsto ofrecer Chávez a África, ya que su país productor de petróleo se enfrenta en estos momentos a una fuerte caída de ingresos, debido a la bajada del precio del crudo.
Chávez dijo que Venezuela ha firmado un acuerdo con la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura, ofreciendo asistencia en materia de agricultura a África, que irá desde semillas hasta ayuda con los sistemas de riego.
La cumbre celebrada en la isla Margarita de Venezuela, se ha ocupado de una amplia variedad de asuntos, desde el hambre en África hasta la crisis económica y un debate sobre una respuesta común al cambio climático. También dio a Chávez una oportunidad de aumentar su influencia en África, mientras que criticó a los EEUU y a Europa, por su influencia en las naciones pobres.
Grandes poderes
“Se acabó el mundo unipolar”, señaló Chávez, refiriéndose a la dominación de los Estados Unidos. “En el siglo XXI, la Unión Africana y América del Sur serán de verdad grandes poderes”.
Gadafi por su parte pidió que se crease una Alianza de Defensa similar a la OTAN para África y Latinoamérica mientras que los líderes se mostraron de acuerdo en unirse para obtener más influencia como bloques económicos y políticos.
“Debemos formar una OTAN para el sur”, declaró Gadafi, “y eso no es una acción terrorista. Tenemos ese derecho”.
Gadafi denunció al Consejo de Seguridad de la ONU calificándolo de club de élite, donde las naciones como Libia no tienen voz, y pidió que los dos continentes se unieran para pedir un cambio.
Desde el presidente de Brasil, Luis Ignacio Lula da Silva, hasta el presidente de Zimbabue, Robert Mugabe, estuvieron de acuerdo en la necesidad de reformar las Naciones Unidas, y pidieron la unidad para hablar con una voz más fuerte.
“Somos 65 países con más de 1.000 millones de habitantes que quieren ser escuchados”, declaró Silva. En cuanto a la crisis económica, el presidente brasileño dijo que “no hay una respuesta mejor a la crisis que la integración”.
Nuevo sistema internacional
Chávez culpó de la recesión económica a los países del norte y dijo que la crisis desvela los fracasos de un capitalismo “especulativo y saqueador”.
“Tenemos que crear un nuevo sistema internacional, y lo estamos haciendo”, dijo el presidente socialista. “La solución está en nuestras manos. Esa solución no está en las dádivas del Norte”.
La cooperación Sur-Sur era la expresión en boca de todo el mundo en la cumbre, que reunió a los bloques de la Unión Africana y a la Unión de Suramérica, UNASur.
Gadafi, que ha gobernado Libia desde que llegó al poder, en 1969, mediante un golpe de estado, ha perseguido en la cumbre una mayor notoriedad a nivel internacional, en los últimos años y actualmente, es el presidente de la Unión Africana. Se reunión con Chávez en una de sus tiendas beduinas de viaje, establecida cerca del complejo hotelero donde se albergaban el resto de líderes.
Gadafi se hizo eco de las preocupaciones de Chávez sobre los poderes económicos mundiales, declarando, mediante un traductor, y sin nombrar países que “ellos piensan que el planeta está dividido en dos partes: señores y esclavos. Los señores están en el norte y en el sur están los esclavos”.
Alineación en defensa
Mugabe, de Zimbabue, criticó las sanciones económicas impuestas contra su gobierno por los Estados Unidos y la Unión Europea, pero dijo que “nosotros seguimos adelante a pesar de todo”. La Unión Europea y otras naciones occidentales que aunque ahora Mugabe preside un gobierno de coalición, no se ha hecho lo suficiente para acometer reformas democráticas después de años de gobierno autoritario.
Chávez defendió a Mugabe diciendo que “ellos le han demonizado” en los medios de comunicación porque es anticolonialista”.
“Tenemos que alinearnos en defensa de él, de su gobierno”, declaró Chávez.
Chávez ha establecido fuertes lazos de unión con otros países, en desacuerdo con Washington, como por ejemplo Irán y Siria, y ha defendido el programa nuclear de Irán, mientras que añade que Venezuela también planea explotar la energía atómica, y que eso no debería preocupar a poderes como los de Estados Unidos.
Preguntado por los periodistas sobre el esfuerzo de Venezuela por detectar depósitos de uranio, Chávez respondió con una sonrisa, “tenemos un montón de uranio, montones y montones de uranio”.
Los líderes africanos, como el de Suráfrica, Jacob Zuma, y el de Argelia, Abdelaziz Buteflika, asistieron a la cumbre junto con ocho presidentes de América del Sur, desde la argentina Cristina Fernández hasta el de Bolivia, Evo Morales.
(News24, Suráfrica, 28-09-09)
