Chad ha puesto fin a una relación de 15 años con African Parks, la organización de conservación ambiental a cuya junta directiva pertenece el príncipe Harry de Inglaterra. El ministro del Medio Ambiente, Hassan Bakhit Djamous, acusó a esta organización sin ánimo de lucro de fallos graves en la protección de la fauna, entre ellos están el aumento de la caza furtiva, la falta de inversión en infraestructura, el incumplimiento de los términos contractuales, y una actitud “reiteradamente indelicada y de falta de respeto” hacia las condiciones claves del acuerdo, así como hacia el gobierno de Chad. Sin embargo, desde la organización se ha solicitado dialogar con el ministerio para escuchar y atender sus quejas y explorar posibles soluciones para mantener la protección de estos territorios críticos.
African Parks, que tiene como objetivo proteger los espacios naturales de África y promover su conservación, sobre todo en países con bajos recursos para cuidar su vida salvaje, está presente en 12 países, en un total de 22 parques nacionales y áreas protegidas. En Chad estaban desarrollando su labor en dos reservas: la Reserva Natural y Cultural de Ennedi y el Gran Ecosistema de Zakouma, que incluye dos parques nacionales.
Esta ruptura marca un revés relevante para la imagen de African Parks, que se suma a otros como la reciente acusación sobre los brutales abusos cometidos por sus guardabosques sobre miembros bakas de la comunidad local en un parque de la República Democrática del Congo y la denuncia de los hechos por parte de Survival. A su vez, cabe destacar que es la segunda vez en un año que se ha criticado una organización benéfica vinculada al príncipe Harry, pues ya tuvo que dimitir de Sentebale, una organización de ayuda a personas con VIH y SIDA que él ayudó a crear para en Lesotho y Botsuana. Él y sus socios fueron acusados de acoso, misoginia y racismo.
Fuente: Qiraat África
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