Chad quiere que las Naciones Unidas, y no la Unión Africana, intente resolver su crisis con el país vecino de Sudán, según ha manifestado su presidente, Idriss Deby.
Deby pronunció un discurso ante varios miles de seguidores en la capital de Chad, Yamena, en el que confesó que había perdido la confianza en la Unión Africana, UA, a la que culpa del fracaso del acuerdo con el asunto de Sudán.
Los dos países productores de petróleo se han estado acusando desde hace tiempo de apoyar cada uno a los rebeldes del contrario, que cruzan las fronteras entre uno y otro, lanzando ataques esporádicos.
El último de una serie de acuerdos que pretenden terminar con la crisis fue firmado la semana pasada, poco antes de que las fuerzas del gobierno de ambos lados de la frontera se enfrentasen a los rebeldes. El combate más grave tuvo lugar en Chad, donde el ejército asegura que murieron 225 rebeldes y 22 soldados.
“Con consideración hacia la UA, Chad le retira su confianza, dándosela en su lugar a la ONU, con el trabajo de resolver la crisis entre Chad y Sudán”, declaró Deby.
En marzo, la ONU reemplazó el comando de una fuerza de protección europea que operaba en el este de Chad. La fuerza pretende proteger a los civiles y ayudar a los trabajadores humanitarios, pero no ha intervenido en ningún enfrentamiento.
Chad ha amenazado en el pasado con cortar las relaciones con la Unión Africana y con Sudán. Acusa a su vecino de respaldar a los rebeldes chadianos y ha reprendido a la UA por fracasar en resolver la crisis.
Deby aseguró que su país no tomará parte en ninguna otra reunión sobre Sudán, sin dar más detalles. En su lugar, dijo, Chad colaborará con el Tribunal Penal Internacional, ICC, que ha emitido una orden de arresto para el presidente de Sudán, Omar Al Bashir, acusado de crímenes cometidos en la región sudanesa de Darfur.
Bashir niega estas acusaciones sobre Darfur, donde un conflicto que dura ya seis años ha matado a 300.000 personas y ha expandido el largo conflicto al país vecino de Chad.
(News 24, 14-05-09)
