Chad-Israel: el fondo de una relación polémica

23/01/2019 | Opinión

israel_chad.png En un memorando firmado en Yamena el domingo 20 de enero de 2019 entre el Primer Ministro israelí y el Ministro de Asuntos Exteriores de Chad, Chad e Israel restablecen sus relaciones luego de más de 46 años de ruptura. La visita del presidente Déby a Israel en noviembre de 2018 ya planteó muchas preguntas sobre las razones que podrían justificar este acercamiento. La llegada de Netanyahu a Yamena solo revive la llama con la firma de este memorando. Más allá de las razones oficiales, ¿qué podría ocultar el restablecimiento de estas relaciones?.

Las relaciones israelí-chadianas siempre han existido.

Ya en 1963, el régimen de Tombalbaye buscó la cooperación militar con Israel para responder a los levantamientos armados y otros levantamientos en el centro y norte de Chad. La provisión de equipo de guerra y de seguridad y el entrenamiento de tropas fue el centro de esta cooperación que Chad rompió en 1972 bajo la presión del mundo árabe, en apoyo de la causa palestina. A pesar de esta ruptura en las sombras, Yamena sigue recurriendo a la industria de armas israelí. Los RAM 4X4 equipados con ametralladoras o misiles antitanques del ejército de Chad están hechos en Israel y dan testimonio de estas relaciones.

¿ Cual es el plan que busca Déby ?

Las razones oficiales de este acercamiento son la seguridad y la cooperación agrícola. Incluso si esta última justificación parece plausible en virtud de la fuerte experiencia del estado judío en el desarrollo de tecnología agrícola en la zona del desierto, ver al Presidente Déby desafiar todas estas controversias para hablar sobre el desarrollo de la agricultura en el desierto. Es menos creíble para quienes conocen al hombre. ¡La verdad está en otra parte!

De hecho, por un lado, el régimen de Déby se enfrenta a varias amenazas armadas que van desde grupos terroristas a lo largo de las fronteras con Libia, Níger y Nigeria, el bastión de Boko Haram, y por otro lado, las rebeliones internas. A esto, se agregan las milicias de buscadores de oro que se enfrentan al Estado en la cuestión de la explotación tradicional de las minas de oro en la región de Tibesti. El otro gran problema es la República Centroafricana, que Déby ya no puede controlar. Las maniobras militares con el despliegue de las fuerzas chadianas a lo largo de la frontera centroafricana para perturbar el régimen centroafricano, aún bajo demanda y con el apoyo de Francia, han fracasado ya que los contingentes chadianos se enfrentan a la presencia de las fuerzas rusas. que ahora supervisan las fuerzas armadas centroafricanas. Es en este contexto que se inscribió la visita de Macron a Chad.

Entonces, ante todos estos grupos armados que interfieren con su autoridad y temiendo las posibles represalias de Rusia por su actuiación en la República Centroafricana, Deby debe encontrar un aliado. Israel es una opción justificada debido a su gran experiencia en la lucha contra el terrorismo y al contar con equipos militares de calidad adaptados para combatir en zonas desérticas. Los servicios de inteligencia de Israel, altamente experimentados y mejor equipados, ya se han anunciado en Yamena con el objetivo de capacitar a agentes de inteligencia de Chad y proporcionar servicios de inteligencia sofisticados. Los grupos armados activos en el norte de Chad utilizan el correo de voz a través de WhatsApp. Una herramienta de comunicación que los servicios de inteligencia chadianos no pueden descifrar hasta hoy. La llegada de los servicios de inteligencia israelíes deberían permitir a sus homólogos chadianos adquirir las habilidades necesarias para interceptar estas comunicaciones con el fin de anticipar ciertas acciones. Maniobras que presagian un oscuro futuro para la libertad de expresión.

Para Deby, este acercamiento también ayuda a restaurar su imagen a los estadounidenses con quienes las relaciones se ven empañadas por el caso de la prohibición de viaje justificada, entre otras cosas, por la debilidad y la incompetencia de los servicios de inteligencia de Chad.

Ante una Rusia desesperada por preservar sus intereses económicos y estratégicos en la República Centroafricana, la elección de Deby de aliarse con Israel es probablemente una apuesta ganadora, ya que abre la puerta a la protección estadounidense a pesar de que la política exterior de Trump es más que al azar

¿Qué ganancias hay para Netanyahu?

Para Israel, Chad tiene dos intereses importantes: diplomático y económico. A nivel diplomático, Israel ha estado activo durante algunos años para reconquistar África, prometió el dorado, a pesar de las complicadas relaciones con algunos países africanos. El restablecimiento de las relaciones es, por lo tanto, una voluntad mucho más clara de Netanyahu, que parte de la precaria situación de seguridad en Chad para proponer una oferta de cooperación a Déby. Para lograr esto, todo lo que tiene que hacer es mantener la bandera de la lucha contra el terrorismo. La lucha contra el terrorismo es el objetivo común de ambos estados. Después de más de 40 años, Israel regresa a África por la puerta grande y es una victoria para el gobierno de Netanyahu, que marca un punto importante para sus detractores. Con este enfoque antiterrorista, Israel puede llegar rápidamente a otros estados, los del G5 Sahel primero. En el frente económico, jugar la carta de agricultura del desierto equivale a entregar el desierto de Chad a los inversores israelíes. Pero el desierto de Chad no es solo una masa de arena, sino que está lleno de enormes reservas minerales, como oro, diamantes y uranio, que podrían ser de interés para el estado judío.

Algunas fuentes ya informan que se han prometido minas de oro, objetos de rivalidad entre varias facciones armadas, a los inversionistas israelíes que se instalarán en esta parte del país y al mismo tiempo permitirán que el régimen de Deby tenga un ojo en todos las actividades rebeldes y terroristas en la región.

En resumen, la restauración del eje Chad-Israel permite al estado judío restaurar el rostro de su diplomacia contaminada por el conflicto con Palestina. En el lado chadiano, esta reanudación de las relaciones, si bien es importante, tiene la apariencia de un apoyo brindado al régimen de Déby que encuentra aquí los medios para aumentar su control sobre el poder y reprimir todos los movimientos de protesta. Todo esto en detrimento de un pueblo chadiano que espera una verdadera asociación para salir del yugo de la pobreza.

Narcisse Oredje , bloguero chadiano

Fuente: ipocit2017.over-blog.com

[Fundación Sur]


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