El presidente de Chad, Idriss Déby, es, desde el día 30 de enero, el nuevo presidente de la Unión Africana (UA), como sucesor de Robert Mugabe, el muy controvertido jefe de Estado de Zimbabue, que cesó en sus funciones en la 26ª cumbre de Jefes de Estado y de Gobierno del continente africano, celebrada a finales de enero en Addis Abeba.
En su discurso inaugural, Idriss Déby prometió no escatimar esfuerzos para alcanzar los objetivos de la organización. Hablando minutos después de su investidura, el jefe del estado chadiano dijo que, a causa de su potencial humano y económico, el continente africano se está imponiendo en el sistema internacional y, como resultado, es codiciado por todo el mundo, tanto a nivel económico como político.
En esta perspectiva, el nuevo timonel de la UA defiende la necesidad de que “nos organicemos para defender juntos nuestros intereses comunes”. Tenemos que “adaptarnos a la nueva dinámica del mundo, en la que la complementariedad y la solidaridad son las mejores armas contra la pobreza y contra las amenazas transnacionales”.
En su primera intervención, el nuevo presidente de la UA reconoció que no es fácil substituir a Mugabe, pero prometió dar lo mejor de sí mismo.
Fuente: O País Online
[Traducción, Jesús Zubiría]
[Fundación Sur]