«Hablar con una sola voz» para exigir, «justicia climática». Bajo la iniciativa de Marruecos, se reunió el miércoles una cumbre africana, en Marrakech, dentro del marco de la COP22, para armonizar la posición de África frente al calentamiento globa,l del cual es la principal perjudicada.
Es importante que el continente africano «hable con una sola voz, exija justicia climática y la movilización de los recursos necesarios y emita propuestas conjuntas» con «objetivos comunes y proyectos regionales y transnacionales», declaró en la apertura de la cumbre el rey Mohammed VI.
Mientras que la conferencia climática se halla en pleno apogeo, la cumbre organizada por Rabat acogió a cuarenta líderes africanos, entre ellos veinte Jefes de Estado, el presidente francés, François Hollande, y el aún Secretario General de la ONU Ban Ki-moon.
Varios presidentes africanos tomaron la palabra, entre ellos el senegalés Macky Sall quien recordó «la expectativa» de los países subsaharianos después de las promesas de los países desarrollados, de financiar la lucha contra el calentamiento global.
El congoleño, Denis Sassou Nguesso, propuso la creación de un «Fondo azul para la Cuenca del Congo», el nigeriano, Mahamadou Issoufou, presentó el proyecto para salvaguardar y rehabilitar la cuenca del Chad. En su declaración final, los participantes apelaron a los «socios estratégicos» en África para que proporcionen «apoyo efectivo y concreto» al desarrollo sostenible.
Reafirmaron sus «respectivos compromisos para dar más coherencia a sus estrategias y (…) acelerar la aplicación de las iniciativas ya identificadas o lanzadas»: la iniciativa marroquí «triple A» para la agricultura, las «energías renovables» para la «conservación de la cuenca del lago Chad», el «Fondo azul para la cuenca del Congo» y el proyecto del “Gran Muro Verde” para el Sahel»…
«Tenemos que actuar», ya que África, con 36 de los 50 países más afectados por el calentamiento global, es «la más afectada», declaró por su lado Ban Ki-moon.
Después del Acuerdo de París en 2015, «hay que luchar por la firma de los acuerdos, confirmar los compromisos», añadió el presidente Hollande. «Pido a la COP21 la definición de un plan para 2020 para África, continuó.
El reto africano de Marruecos
Más allá del clima, la cuestión clave para el organizador marroquí de esta cumbre es también diplomática. Al estar reunidos un grupo de líderes africanos, Marruecos pretende demostrar su fuerte compromiso con África. Con la cuestión del Sáhara Occidental como tema principal y, como meta a corto plazo, la reintegración de Marruecos en la Unión Africana.
«Marruecos está firmemente comprometido con la consolidación de la seguridad y la estabilidad en África y está determinado a reforzar su contribución a la defensa de los intereses vitales del continente, junto con sus países hermanos», reiteró Mohammed VI.
El monarca ha multiplicado sus viajes por el continente estos últimos meses, no sólo en su tradicional zona de influencia: África occidental. También visitó Ruanda y Tanzania y tiene previsto visitar Addis Abeba y Madagascar justo después de la COP22.
El objetivo declarado es reunir el máximo apoyo en la cuestión del Sáhara Occidental, antigua colonia española, controlada desde 1975 por Rabat, de la que el Frente Polisario, apoyado por Argelia, quiere la independencia.
Por ahora, se trata de conseguir la reintegración de Marruecos en la Unión Africana, una organización que Rabat abandonó en 1984 en protesta por la admisión de la República Árabe Saharaui Democrática (RASD) del Frente Polisario.
Este retorno, anunciado a mediados de julio por Mohammed VI y cuya solicitud ya sido formalizada oficialmente en septiembre, ha dado lugar a una silenciosa lucha con su rival: Argelia, siempre en torno a la cuestión del Sahara.
La próxima cumbre de la UA está prevista para principios de 2017 en Addis Abeba.
afrique360.com
Fundación Sur
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