Noticias aún sin verificar el día 28 de mayo, afirman que un drone estadounidense ha caído cerca de Bulo-Marer, en la región del sur de Somalia, Shabelle. El gobernador regional Abdul Gadir Mohammed Nur, declaró a la agencia de noticias VOA (Voice of America), que los servicios somalíes habían confirmado la caída, y todavía estaban especulando si podía haber sido derribado por las milicias o no.
Después, Al Shabaab confirmó en su cuenta oficial de twitter que están en posesión de los restos del drone, que estaba siendo trasladado a otro lugar. Incluso más tarde ha publicado diversas fotografías de los restos del avión no tripulado acompañadas de frases como “este ya no volverá a espiar a los musulmanes”.
Bulo Marer, el lugar donde cayó el drone, sigue siendo un bastión de Al Shabaab, también fue escenario del fallido intento de rescate del ejército francés de su oficial Denis Allex, a comienzos de este año.
El gobierno de Estados Unidos normalmente no confirma ni niega este tipo de informaciones, pero esta no es la primera vez que un drone cae en zonas bajo control de las milicias. Con el aumento de la piratería en el Océano Índico, la milicia relacionada con Al Qaeda en Somalia y el vecino Yemen, Estados Unidos ha intensificado de forma notoria la utilización de drones tanto para labores de espionaje como para ataques, para combatir las amenazas, tanto las reales como las imaginadas.
Sin embargo, hace más de un año, el gobierno de Estados Unidos suspendió las operaciones de drones en las islas Seychelles para labores de investigación, después de que un MQ-9 Reaper se convirtiera en el segundo drone en estrellarse en un mes. A menos que volara lo suficientemente bajo como para que armas de la era soviética lo pudieran derribar, es muy improbable que un avión de estas características pueda ser derribado, debido a la altitud que puede alcanzar. Dicho esto, Al Shabaab en ningún momento ha afirmado que lo hayan derribado, sol que está en su poder.
(Somalia War Monitor, 28-05-13)