De acuerdo al último reporte del Índice Global de Terrorismo (2023), el número de víctimas de ataques terroristas en la región del Sahel se ha incrementado más de un 2.000 % en los últimos 15 años. Burkina Faso es el país más afectado por el terrorismo de todo el continente, y el segundo a nivel mundial. Sólo le supera Afganistán, que se coloca en el primer puesto mundial. Somalia, Malí y Siria ocupan el tercero, cuarto y quinto puesto, respectivamente.
Según el reporte, la región del Sahel constituye en la actualidad el epicentro del terrorismo. En 2022, se produjeron allí más muertes por terrorismo que en el sur de Asia, Medio Oriente y el norte de África combinados. 22.074 personas fueron asesinadas en el Sahel en un total de 6.408 ataques terroristas entre 2007 y 2022.
La información oficial indica que a nivel global la mayoría de los ataques son perpetrados por el Estado Islámico, Al-Shabaab, JNIM (“the Support Group for Islam and Muslims”) y el Ejército de Liberación de Baluchistán. El número total de muertes descendió casi un 9 % comparado con 2021, pasando de 7.328 a 6.701 muertes. Sin embargo, en Burkina Faso se han registrado 1.135 muertes, lo cual representa un incremento del 50 % comparado con los datos de 2021.
Fuente: Africa News
[Traducción y edición, Itzá Camacho de Domingo]
[CIDAF-UCM]