Pensaba que después de todo lo que ha pasado esta semana en Burkina Faso, hoy, domingo, 9 de noviembre, tocaba escribir el epílogo de los acontecimientos que han convulsionado este pequeño, pobre, misérrimo, país.
Pero parece que esto es más una historia de Epi & Blas tirándose las pelotas (o de las pelotas) los unos a los otros.
Resumen de lo publicado:
10 días (o menos) que estremeciaron al mundo
Burkina Faso, nuestro minuto de gloria
Para los que no se tomen la molestia de pinchar y leer y quieran la sabiduría y el conocimiento al instante, tipo internet Nescafé soluble, les recuerdo que esa parte la lleva Twiter, que intento imitar aquí seguido:
Ha habido una revolución o golpe de estado en Burkina Faso. O ha habido una revolución seguida de golpe de estado en B.F.
Hasta aquí es lo que daría de sí un tuit, más o menos, pero si queréis os puedo contar más.
Venga vamos, más resumen:
Se ha derogado la Constitución, disuelto el Parlamento y el Gobierno.
Y después del descontrol inicial varias personas quisieron tomar el poder o hacerse nombrar Presidente de la República.
Longué, general retirado, que tuvo que esconderse en la Cour del principal rey tradicional, Moogo Naaba y que al intentar huir de otros militares saltando el muro de la cour, se partió las piernas y ahora se encuentra hospitalizado en una Unidad de Vigilancia Intensiva. Me refiero a que está vigilado por militares, más que por médicos.
Después el general Traoré, jefe del Estado Mayor del Ejército, pero que fue depuesto el mismo día por el Teniente Coronel Zida, que es el 2º en el mando en el Regimiento de Seguridad Presidencial. Y que ahí sigue.
Resumiendo más, desde la toma del poder, Zida se ha visto presionado por la oposición política y las organizaciones de la sociedad civil para que los militares dejen el poder y organizaron el domingo, 2 de noviembre, una concentración en la Plaza de la Nación para presionarles y Zida envió sus efectivos y dispersaron rápidamente a los concentrados, con sus porras y su munición de fogueo.
El mensaje fue comprendido enseguida, lo de que quemaran la Asamblea Nacional y la expulsión de Blaise Compaoré estaba aceptado, pero no más jueguecitos con el ejército.
Así que en estos días se han sucedido contactos con los partidos políticos, organizaciones de la suciedad civil, autoridades religiosas, autoridades tradicionales, sindicatos, empresarios…
Y todo el mundo haciendo declaraciones en los periódicos, que si esto, que si aquello, de lo de más allá nadie habla (que tienen a Allah, siempre presente) y, sobre todo, que los militares tienen que entregar el poder a los civiles. Que está muy bien, de acuerdo, a los civiles, pero ¿a qué civiles?
A estas declaraciones se han unido otras de la Unión Africana o la CEDEAO, diciendo lo mismo: que entreguen el poder a los civiles o habrá sanciones contra BF.
Incluso Canadá ha tomado ya la decisión de suspender toda colaboración y ayuda a BF.
Todos los proyectos están suspendidos.
Por otra parte los militares, Zida, están siguiendo una táctica de desgaste y hechos consumados.
Mal que bien, todos aceptan (aceptamos) que al menos haya un poder real que controle el país y acabe con los saqueos y la anarquía existente.
Han dado la orden a todos los Secretarios Generales de todos los Ministerios (2º en el escalafón, después de los Ministros) de retomar las actividades, cosa que han hecho.
Y han respetado a todos los alcaldes electos, aunque fueran del CDP, partido del Gobierno anterior, salvo en las alcaldías de Ouagadougou, Bob-Dioulasso y Ouahigouya (mi ciudad). Aquí también otro que no puede volver es el Presidente del Consejo Regional, que es el que salía uno de los artículos anteriores haciendo una declaración.
Zida empezó declarando que en 2 meses dejaba el poder, pero ahora ya plantea que él, como Jefe del Estado, figura creada de la noche a la mañana, nombrará un Presidente Interino que se ocupará de organizar unas elecciones dobles o triples en el plazo de un año, para finales de 2015.
Vamos a ver si da tiempo o tienen que ‘consolidar’ más la democracia..
Creo que BF no ha tenido tanta presencia en los medios de comunicación españoles desde que…, bueno, qué tontería si nunca ha tenido ninguna presencia.
Pero esta vez sí, mogollón para lo que es esto.
Hemos salido en todos los medios, incluso en algunos enteros: periódicos, radios, TV, prensa digital, redes sociales…
Nuestro minuto de gloria como os contaba en otro post. Pero ya se acabó lo que se daba o lo que se contaba.
Hasta yo he salido en la radio (a las 3 de la madrugada, eso sí) y Montse una amiga que está conmigo ayudándome en la Biblioteca OLVIDO, ha salido en noticias CUATRO.
Españoles en BF debemos ser poco más de 50 y tuvimos un chat en Wasap abierto para intercambiar información entre nosotros y con la Embajada de España (en Costa de Marfil, que aquí no hay) y nos hemos partido a reír con la noticia, ¿sensacionalista?, no que eso es poco, que publicó el diario EL PAÍS:
“RESCATADOS SEIS ESPAÑOLES QUE ESTABAN ATRINCHERADOS EN BURKINA FASO”
Lo que nos hemos podido tronchar con esta historia.
Sobre los empleados de una empresa española que trabajan en una mina de manganeso (símbolo químico, Mg, sé poco más sobre ello) y parecía que estuvieran ‘atrincherados’ dentro de la mina.
La gente se hará la imagen de los pobrecitos escondidos en una galería o a la entrada de la mina detrás de la trinchera o de la barricada que hubieran creado atravesando vagonetas y armados hasta los dientes con los cartuchos de dinamita, dispuesto a vender caras sus vidas…
Estos periodistas son la bomba.
A mí me da miedo cada vez que leo algo, porque si son cosas como estas que conozco de primera mano y veo las burradas que se pueden llegar a escribir para vender más prensa, me imagino qué no será con las cosas que desconozco y hasta qué punto me puedo fiar: NADA, seguramente.
Resumiendo: las empresas mineras de este tipo, en el extranjero, tienen un protocolo para evacuar inmediatamente a su personal porque no les merece la pena el menor riesgo de que pase algo y dañar su imagen pública y tener que pagar indemnizaciones multimillonarias.
Son gente que han venido por un buen sueldo y que les importa un pimiento el país y lo que pase aquí. Cosa que comprendo perfectamente.
No como la mayoría de los que estamos en BF, que casi todos es en proyectos de cooperación y solidaridad con el 5º país más pobre de la Tierra, y al que amamos, de una u otra manera.
Anteayer fui a ver a un amigo burkinés para comentar el partido y los mejores goles de la jornada revolucionaria.
Él era el presidente de la Cámara de Comercio de mi ciudad al que habían ‘depuesto’ de su puesto, valga la redundancia, porque su mujer se había hecho de un partido de la oposición, MPP.
Así que a él le tocó que le quitaran el cargo, el coche, el chófer y parte de sus emolumentos.
Y que le enviaran a la sede de la capital, pero sin puesto, sin despacho y sin ninguna actividad específica.
Lo que sería un disponible forzoso, sin oficio ni beneficio.
Le conté cómo lo estábamos pasando y que habíamos vuelto a abrir la Biblioteca, pero que el viernes 31 pensábamos que iban a venir a saquear e incendiar la biblioteca y que nos llevamos mucho material y ordenadores a casa para intentar salvar ‘los muebles’ (bueno, muebles no nos llevamos, sólo material informático).
Me dijo que no me preocupara que no nos iban a tocar jamás, que soy respetado por lo que hago y que nadie dejaría que me hicieran nada.
Todos los saqueos y pillajes de mi ciudad parece ser que han recibido siempre el plácet de algún responsable, si se le puede llamar así. Y me dejó entender que él mismo, o en compañía de otros, nunca dejaría que me pasara nada malo a mí o la biblioteca.
Me quedé egoístamente más tranquilo, aunque más preocupado al ver que no es sólo la locura de una turbamulta descontrolada.
Otra cosa es en Ouagadougou, la capital, donde han saqueado todos los Depósitos de Seguridad Alimentaria estatales, amén de los almacenes de empresas o empresarios particulares.
Me contaba mi suegra que el saco de 50 kgs de arroz que cuesta normalmente (está subvencionado) 22.000 Fcfa (30 €) se podía encontrar de estrangis por, ¡alucina!, 1.500 Fcfa (2,25 €).
Lo cual es terrible, me refiero a que estén vacíos los Depósitos, porque este año la cosecha no ha sido buena y la población se va a encontrar con serios problemas de hambre. Espero que no desatenderán, el Gobierno de transición, este grave problemas que se va a presentar de aquí a unos meses.
Así es como están las cosas en BF: en stand by
Seguimos a la espera de que se desvele la pregunta del millón:
¿Quién será el Presidente Interino?
Yo no sé si os lo he dicho, pero quedo descartado porque no soy natural del país, por más que me hayan hecho Caballero de la Orden de Mérito (tenían que haberme puesto Mérito y Capacidad).
Por ahora Zida les tiene reunidos a todas las fuerzas vivas discutiendo el candidato. Ellos pasan de vez en cuando por la reunión a saludar (no es coña).
Los partidos, las organizaciones de la sociedad civil, las autoridades religiosas y costumbristas, varios días de reunión, dale que te pego, que si yo, que tú no, ¡pues anda que tú!, me imagino que serán los diálogos, más o menos ‘vestidos’ de palabrería.
Y, al final, pasados días y días y a pesar de las presiones para que resuelvan cuanto antes, tendrá que ser el Ejército, o Zida, quien les imponga un nombre para salir del impasse.
Así que, sin contar conmigo, que lo mismo me ofrecen un Ministerio sin cartera (porque estoy canino de fondos), me apuesto el millón de la pregunta a que el Presidente Interino que se va a nombrar se llama Barthelemy Kéré.
Es un conocido y respetado abogado con un gabinete jurídico con varios abogados, fue Presidente del Colegio de Abogados, Batonier, o como se llame, y actualmente Presidente de la Comisión Electoral Nacional Independiente (CENI), desde que desapareció el anterior, muerto en extrañas circunstancias.
Es la entidad que se ocupa de organizar las elecciones y proclamar los resultados.
A mí, por otra parte, me parecería muy bien: es mi abogado en Burkina Faso.
No él directamente, con el que mantuve la primera entrevista, sino con uno de los abogados de su despacho, Fulgence.
Kéré además es un poco hombre íntegro (lo que da nombre al país): me dijo que si yo venía a dejar mi dinero y mi esfuerzo para ayudar a su país lo menos que podía hacer era atenderme jurídicamente y no cobrarme.
Un detallazo.
Original en: FronteraD
