El director de publicación del semanario BENDRE, ocupa desde octubre de 2010, la presidencia del Foro de Editores Africanos, organización panafricana de responsables de medios de comunicación, con sede en Johannesburgo (Suráfrica).
¿QUIEN ES ESTE HOMBRE?
Licenciado en Filología Francesa, Chériff fue profesor de Instituto de Secundaria. Su verdadera pasión era la agricultura. Quería llegar a ser un importante granjero, de modo que abandonó el magisterio para dedicarse a su finca. Él quería transformarla en una explotación agrícola y ganadera, una especie de rancho al estilo surafricano.
Sin embargo, el año 1987, su vida sufrió un giro de 180 grados, después del asesinato del carismático presidente Thomas Sankara, amigo de su hermano mayor.
Chériff fue detenido y torturado por los hombres del capitán Blaise Compaoré – que desde entonces está en el poder usurpado a su amigo y compañero de armas Sankara -, hasta que finalmente en1989 consiguió huir al Malí
EXILIO EN MALI Y FRANCIA
En su exilio, Chériff cuenta que tuvo mucha suerte y que Dios lo protegió en todo momento. Tuvo la oportunidad de asistir a la revolución que derrocó al general Mussa Traoré. Durante aquellos años, trabajó en la revista JAMANA, dirigida por Alpha Umar Konaré, que posteriormente llegó a ser presidente de Malí.
En este tiempo Chériff sintió la necesidad de escribir artículos de opinión, diciendo lo que él pensaba sobre cuestiones importantes. Después marchó a Francia, desde donde decidió contar lo que estaba pasando en su país, Burkina Faso.
NACIMIENTO DE BENDRE
Estando en Francia comenzó a publicar BENDRE en tamaño folio, que expedía por correo a Burkina Faso, donde enseguida sus amigos lo reproducían a centenares de copias, que difundían en los medios de la oposición.
En 1991,con la adopción de la nueva Constitución se sintió más seguro y regresó a su tierra, como hiciera también Joseph Ky-Zerbo y otros políticos de varios partidos.
Entonces registró su periódico, que comenzó a publicarse con 16 páginas.
Los comienzos no fueron fáciles. Eran sólo dos redactores, por lo que algunas veces pasaron seis meses sin publicar el periódico. Trabajaban con un único ordenador viejo, ellos mismos maquetaban la revista, la llevaban a la imprenta yla distribuían por los quioscos de prensa de Uagadugú, la capital.
Con el tiempo las cosas fueron cambiando. Recibieron una subvención del Fondo de Ayuda a la Prensa francófona de 20.000 Francos franceses (algo más de 3.000 euros actuales). Con esta ayuda pasaron de trabajar en su casa a tener un local. Compraron algunos ordenadores, contrataron a otro periodista, un administrador y una secretaria.
Hoy, son cinco periodistas en la redacción de BENDRE y aunque siguen habiendo dificultades, la presión y el estrés han disminuido. Además, desde el año2010, la publicidad empieza a llegar tímidamente. En la actualidad el cerco se ha aflojado y el periódico ya no vive solamente de sus ventas. Durante mucho tiempo no tuvieron acceso a la publicidad privada, ni institucional, a pesar de pagar sus impuestos. Las empresas, incluso de sus amigos, temían que el régimen de Compaoré les quitara cuotas de mercado por colaborar con BENDRE. En el país había otros dos periódicos que sufrían ese embargo. Para lograr su independencia tuvieron que hacer sacrificios.
EL CLIMA ACTUAL DE LA PRENSA BURKINESA
Chériff opina que hoy día existe una relativa libertad de expresión, tanto en las emisoras de radio, como en la prensa escrita. Esta mayor distensión se logró después de las movilizaciones de la sociedad civil, cuando el periodista Norbert Zongo fue asesinado en 1998. Zongo era amigo de Chériff, habían compartido el mismo local de trabajo y ambos tenían la misma línea editorial.
Zongo era un periodista de investigación que denunció varios abusos, corrupción, mal gobierno, y terminó pagándolo con su vida. El gobierno de Compaoré fue acusado del asesinato de Zongo y no tuvo más remedio que poner fin a su sistema de represión de la prensa. Desde entonces en Burkina no se ha encarcelado a ningún periodista, aunque algunas veces se haya registrado alguna presión y amenaza, pero sin llegar a actuar.
Por eso, cada vez que se habla de libertad de prensa en Burkina se evoca el caso de Norbert Zongo. “No era sólo un periodista, era también un brillante profesional, con una bonita pluma, que editaba L’Independant, el periódico más leído en el país y de mayor tirada,”declara Chériff.
A pesar de que en Burkina se han despenalizado los delitos de prensa, ningún periodista ha sido enjuiciado, precisamente porque hacen bien su trabajo. El ejemplo de Zongo ha servido de estímulo para ejercer una información responsable y bien estudiada.
UN FORO IMPRESCINDIBLE
Siendo responsable del Centro de Prensa Norbert Zongo y de la Sociedad de Editores de Prensa Privada de Burkina Faso, Chériff asumió la presidencia del Foro de Editores Africanos (FEA) en octubre de 2010. Su elección tuvo lugar en Bamako (Malí) durante la cumbre anual de esta organización panafricana de responsables de medios, creada en2003 y concede en Johannesburgo (Sudáfrica).
El objetivo de esta plataforma, que reúne a cerca de 200 directores de publicaciones procedentes de 36 países, es defender y promover la libertad y la independencia de prensa, para convertir los medios en soportes profesionales y creíbles.
Los miembros de la FEA luchan también por ser observadores ante la UA –Unión Africana- porque se han dado cuenta de la necesidad de diálogo entre las organizaciones de prensa y los líderes políticos para evitar recelos e incomprensiones recíprocas.
Otro de los objetivos de los editores africanos es intercambiar material informativo. Dice Chériff: “¿porqué un surafricano, si quiere información sobre Burkina Faso, debe leer los teletipos de la Agencia France Presse o Reuter?
Razón no le falta, pues periodista francés o americano nunca contará la noticia de Burkina Faso como un burkinés. Un africano entiende mejor el contexto en el que ocurren los hechos en su país, pero en el mercado internacional de la información se venden mejor las noticias de Reuters o de France Presse, que las de agencias africanas.
De momento, el FEA actúa como embrión de una futura Agencia de Prensa Panafricana.
Desde nuestro rincón de “Bitácora Africana” deseamos que se alcancen esas metas.
