Está aumentando la tensión en Madagascar, donde el presidente Hery Rajaionarimampianina fue amenazado con ser destituido por el Parlamento, pero aún no está confirmado por la Corte Constitucional, que debe emitir un fallo al respecto.
En la capital del país Antananarivo, la policía detuvo el automóvil en el que viajaba Lanto Rakotomanga, diputada del partido MAPAR, quien acababa de reunirse con el líder de esta fuerza política: el expresidente Andry Rajoelina. Después de haber dispersado con gases lacrimógenos un grupo de personas (alrededor de 20 parlamentarios) que habían iniciado una protesta en el lugar, la policía le confiscó una gran cantidad de dinero a la diputada (equivalente a 66.000 euros). Esto, según los agentes, sería la prueba de un “delito flagrante”, probablemente un intento de soborno, mientras que el MAPAR dijo que eran “fondos del partido” para la campaña electoral para las próximas elecciones municipales.
Ahora la diputada está hospitalizada, y el presidente de la Cámara de Diputados, Jean Max Rakotomamonjy, condenó el incidente, y habló de “brutalidad” y terrorismo