La erupción volcánica cambió de comportamiento esta mañana sobre las 08:00 h., aumentando en intensidad con fuertes explosiones y emisiones incandescentes, según constata el equipo Uni-CV que realiza las actividades de monitorización.
Nadir Cardoso, que coordina el equipo, ha declarado a los medios de comunicación que alrededor de las 07:00 cuando él llegó a la caldera la situación estaba en calma, pero momentos después al acercarse al foco eruptivo para realizar la medición de gases hubo un cambio en el comportamiento del volcán, que aumentó su intensidad.
Según el mismo Sr. Cardoso, ha habido fuertes explosiones con emisiones piroclásticas incandescentes, ceniza volcánica y gases que forman una columna de humo de unos 300 metros de altura y se dirige hacia este del pico eruptivo.
Ante la aparición de un cambio de comportamiento, el equipo de Uni-CV aconseja a las personas que no se acerquen a la cima eruptiva que sigue activa, aunque no emita lava desde hace unas tres semanas.
Al acercarse ya a los dos meses (58 días) desde el inicio de la erupción volcánica, el foco eruptivo se mantiene activo y los expertos no se atreven a avanzar un pronóstico para el final de la actividad, aunque consideran que se encuentra en su fase de declive.
La erupción volcánica de 23 de noviembre de 2014, una de las tres erupciones registradas en la caldera en los últimos 63 años, ha destruido no sólo las dos ciudades principales, Portela y Bangaeira, y el pequeño núcleo de población de los islotes de Losna, extensa zona de cultivo, sobretodo de: frijoles, patatas, yuca, mandioca y frutales, sino también toda la infraestructura económica, social y turística que existía en Chã das Caldeiras
[Fuente: sapo.cv-Fundación Sur]