Las agencias de Ayuda humanitaria que operan en Sudán del Sur han expresado su preocupación por el incremento de las amenazas de inseguridad que tienen lugar en los campos de refugiados, en la región del Gran Nilo Alto, diciendo que socava el carácter de solicitantes de asilo.
“Los socios humanitarios están alarmados por los informes sobre el aumento de elementos armados en los campos de refugiados” en el estado de Upper Nile, en el condado de Maban, según el último boletín humanitario de la ONU.
“La presencia de personal armado entre los refugiados socava el carácter de solicitantes de asilo y pone en peligro a los refugiados y a los trabajadores humanitarios” afirma en boletín.
El campo de Maban alberga la población más grande de refugiados sudaneses, con al menos 110.000, le sigue el de Yida, con unos 60.000 refugiados. Sin embargo, los dos campos están cerca de la frontera entre los dos países, Sudán y Sudán del Sur.
En los últimos meses, a la vez que se producía tensión militar entre los dos países se produjeron bombardeos en el campo de Yida.
La ONU también informó sobre la llegada de 700 nuevos refugiados sudaneses, desde Sudán, la semana pasada.
Al menos 200.000 refugiados sudaneses han llegado a Sudán del Sur desde el estallido de la guerra civil entre el gobierno de Sudán y el grupo rebelde SPLM-Norte, en los estados de Kordofan Sur y Nilo Azul, el año pasado en junio.
El Alto Comisionado en la agencia de la ONU para los Refugiados, Antonio Gutierres, expresó el más pasado a su llegada a Sudán del Sur, su gran preocupación por los problemas a los que se enfrentan los refugiados en los campos, haciendo hincapié en que debían trasladarse los campos más al sur dentro de Sudán del Sur, para minimizar la inseguridad.
Gutierres dijo que las agencias anticipan la llegada de más refugiados a Sudán del Sur, mientras continúa la lucha entre las dos partes, el gobierno y los rebeldes, que se espera que se intensifiquen cuando pronto llegue la temporada seca.
El alto diplomático de la ONU dice que se espera que lleguen a Sudán del Sur al menos 350.000 nuevos refugiados el próximo año, y ha pedido un apoyo adecuado de la comunidad internacional, tanto político como humanitario.
Waakhe Simon Wudu
(Gurtong, Sudán del Sur, 04-12-12)