A pocos días de cumplirse medio siglo del conflicto del Sáhara Occidental, miles de saharauis refugiados en los campamentos de Tinduf, en el sur de Argelia, salieron a las calles para expresar su rechazo al nuevo intento de borrar su derecho a la autodeterminación. Las manifestaciones coincidieron con la votación en el Consejo de Seguridad de la ONU que tuvo lugar el 31 de octubre sobre una resolución impulsada por Estados Unidos. Esta propuesta renueva el mandato de la misión de Naciones Unidas (MINURSO) y destaca la propuesta marroquí de autonomía como única vía política.
Durante varios días, las avenidas de los campamentos se convirtieron en escenarios de protesta. Los manifestantes corearon consignas como “Nunca seremos marroquíes” y “Queremos libertad, no autonomía”, mostrando su rechazo a cualquier acuerdo que no contemple un referéndum libre y supervisado por la ONU. Las pancartas y banderas saharauis ondeaban junto a mensajes dirigidos a Washington, al que acusan de “legitimar la ocupación marroquí”. Según los refugiados, la resolución estadounidense supone una desviación del consenso internacional que durante décadas ha reconocido el derecho del pueblo saharaui a decidir su futuro. “Prefiero seguir siendo refugiado antes que ser marroquí”, declaró un joven, reflejando la frustración que domina entre quienes han nacido y crecido lejos de su tierra. Desde los más mayores, que aún recuerdan el éxodo de los años setenta, hasta los jóvenes que solo conocen el desierto argelino, la demanda es la misma: independencia y reconocimiento internacional. En medio de las arenas de Tinduf, la voz de Aïcha, una mujer de 25 años, resumía el sentir colectivo: “Somos el Frente Polisario, somos la República Árabe Saharaui Democrática, y no renunciaremos a la libertad”.
Fuentes: Dzair Tube – Sahara Press Service
[CIDAF-UCM]