Angola lidera la clasificación de los países africanos que más han gastado en presupuesto militar durante el año pasado, con 6,8 millones de dólares. Este país gasta más en defensa que Sudáfrica y Nigeria juntas, según el Instituto de Investigación para la Paz Internacional de Estocolmo.
Las dos grandes economías de África, Sudáfrica y Nigeria, llegaron a un gasto conjunto de 6 millones de dólares en presupuesto militar. Según Antonio Luvualu de Carvalho, profesor de Relaciones Internacionales, “el gasto militar de Angola se justifica, entre otras cosas, por su ubicación geoestratégica”. Ésta requiere, continúa, que Angola tenga siempre un ejército disponible para responder a las dinámicas de las regiones donde se encuentra. “Hoy en día, las organizaciones subregionales se asumen como elementos clave para garantizar la paz en el continente y más allá”, informa, haciendo hincapié en el papel militar de Angola tanto en la Comunidad Económica de África Central como en la Comunidad para el Desarrollo de África Austral.
El profesor Luvualu señala además la necesidad de proteger las vastas fronteras del país. Con la República Democrática del Congo, por ejemplo, Angola comparte más de 2.500 kilómetros, hecho que justifica la inversión militar para el país, según Belarmino Van-Dunem, también experto en Relaciones Internacionales. Además, según su explicación, el presupuesto se dirige también a la reforma y modernización de las fuerzas armadas angoleñas.
El profesor Luvualu declara que “el avance del grupo Boko Haram, que dividió a Nigeria en dos y amenazó a otros grupos de la región como Níger y Camerún, se debe a la debilidad de de la inversión en las fuerzas armadas del país”. Ambos expertos coinciden también al explicar por qué Sudáfrica gasta menos que Angola en defensa: “la estructura de las Fuerzas Armadas es auto-sostenible. El ejército sudafricano posee una industria de guerra con la exportación, además de prestar servicios en diversas áreas, captando, por lo tanto, ingresos”.
Si el gasto militar de Angola supera al de Sudáfrica, en educación y salud ocurre lo contrario. La diferencia es especialmente notable en salud: los sudafricanos gastaron en 2013 casi un 9% de su PIB, doblando la cifra de Angola (3,8%) y de Nigeria (3,9%).
Carlos Rosado de Carvalho
Expansao – Fundación Sur
Traducción de Iris Pugnaire Sáez