Angola a por Venecia, segunda parte, por Afribuku

17/03/2015 | Bitácora africana

Autora: Angela Rodríguez Perea

Acaban de anunciar cartel y es toda una reafirmación: El León de Oro ganado en 2013 no los deshinchó, Angola no se ha quedado durmiendo la siesta apaciblemente con su trofeo, obtenido nada menos que el año en el que se estrenaba como país participante. Muy al contrario. Para la 56ª Bienal de Venecia, que se inaugura el próximo mes de mayo, Angola vuelve apostando con algunos de sus más reconocidos artistas y repite comisario, el aclamado António Ole, el mismo que los llevaría a lo más alto en la pasada edición.

Probabilidades de repetir palmarés tiene muy pocas. Haciendo un poco de revisión de sus más de 100 años de historia, nunca ha recibido galardón de manera consecutiva un pabellón nacional en esta cita. Aunque sí son habituales del Oro Alemania, Francia, Estados Unidos y, faltaría más, Italia. Pero el peso de la Biennale es tan grande que cada gesto y elección se interpreta y politiza. Y eso lo tienen cada vez más claro los organizadores que, poco a poco, se van enmendando respecto a la presencia de propuestas artísticas no occidentales. La asistencia africana ha sido más bien tímida hasta hace poco. Si dejamos de lado la presencia del gigante que es Sudáfrica, se inició con un pabellón agregando trabajos del continente; poco a poco irían apareciendo pabellones nacionales como el de Kenia, Zimbabue o Costa de Marfil. En 2001 se extendió un reconocimiento a Yinka Shonibare, que por otro lado representaba de manera natural a su Gran Bretaña natal; en 2007 fue ya Malick Sidibé quien recibiría un León de Oro por el conjunto de su obra. Angola ha sido pues el primer país africano en verse concedido el primer premio con su “Luanda, ciudad enciclopédica” y este año vuelve con fuerza para demostrar que están a la altura, a pesar de las críticas (con poca base, estimamos) que la decisión de 2013 despertó en medios como el alemán Kunst.

Este año tiene de especial a un comisario que admiramos enormemente, el crítico de arte nigeriano Okwui Ewenzor, uno de los pocos africanos en destacar y hacerse respetar en la jungla internacional que se ha vuelto hoy el arte contemporáneo. A él le debemos, entre otras muchas cosas, el volumen “Arte africano contemporáneo desde 1980? o la revista Nka journal of contemporary art. Director de la Haus der Kunst (Casa del Arte) en Múnich, su aparición a la cabeza de la Biennale no nos llega completamente por sorpresa, después de haber comisionado citas tan importantes como el Documenta 11 de Kassel (Alemania).

Una parte de Angola se traslada pues, a partir del 5 de mayo próximo, al Palazzo Pisani. Les presentamos a los artistas de esta propuesta que se titulará “On ways of travelling” (Sobre maneras de viajar) :

Esta gran figura, que aparece muy a menudo en las fotos de las revistas con un gesto de malas migas, casi no necesita presentación. Artista plástico, fotógrafo y hasta realizador, António Ole es venerado en el país y fuera de él. Además de comisariar el pabellón angoleño, António Ole participa como artista central, y las instalaciones del resto de participantes son en cierto modo un homenaje al “maestro”, o así lo hacen ver las notas de prensa que nos llegan de los organizadores. Nos preguntamos si se trata de un ramalazo de egocentrismo del comisario…

Francisco Vidal

A este artista nacido en Lisboa, de madre caboverdiana y aclamado por muchos como una especie de “Basquiat portugués” (una etiqueta probablemente poco acertada, motivada sobre todo por el parecido físico), el comisariado lo toma prestado por la línea sanguínea paterna, que lo liga directamente a Angola. Su trabajo interpreta la coyuntura política actual, la condición de la diáspora africana o el post-colonialismo, en un estilo espontáneo. Partiendo de la instalación central de Ole, en la Biennale se servirá de machetes como soporte pictórico, haciendo referencia a la resistencia angolana. Doble felicitación a Francisco Vidal que, además de confirmar su comparecencia, cumplía ayer 37 (exitosos) años.

Délio Jasse

Representa a esa nueva generación de fotógrafos que el Ministerio de Cultura ha decidido traer a la exhibición como un ejemplo del futuro de la escena angoleña. Paradójicamente, Jasse trabaja principalmente en la arqueología fotográfica y la superposición visual a modo de memoria. Retrata a menudo Lisboa interrogando al pasado y sobreescribiéndole el presente. De su Luanda natal ha hecho ya un recorrido por la arquitectura de los 50, cámara en mano.

Nelo Teixera

Es uno de los nombres menos conocidos. Su principal instrumento de trabajo es la madera. De su currículum artístico tenemos pocas o ninguna exposición, ni siquiera colectiva, pero los elogios de António Ole sirven a muchos para disipar dudas. Tenemos mucha curiosidad por ver cuál será el resultado de su participación.
Binelde Hyrcan

Binelde Hyrcan

A medio camino entre lo audiovisual y las artes plásticas, es sin duda el más rompedor de todo el grupo. El artista de las gallinas, que proyecta en ellas una representación absurda del poder humano, se ha hecho conocer por sus intervenciones en eventos TEDx. Su presencia es representativa de una corriente joven y atrevida que tiene mucho que aportar y con lo que sorprender al mundo.

Original en : Afribuku

Autor

  • afribuku

    Afribuku pretende hacer descubrir y reflexionar sobre manifestaciones culturales africanas contemporáneas de interés, divulgándolas a través de esta página y de las redes sociales. En África existen numerosas propuestas artísticas de excelente calidad que permanecen ocultas a los ojos del mundo. Es necesario que todos aquellos que creemos en una visión más realista y honesta de África tratemos de que la comunidad iberoamericana se familiarice y comience a disfrutar de la gran diversidad que ofrece este continente.

    @afribuku

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