La ‘sharía’, según Libia
Por Francisco Perejil
El País
15/09/2011
Los nuevos responsables del ministerio de Justicia aseguran que aunque se aplique la ley islámica, el país nunca será como Arabia Saudí.
Ministras libias, embajadoras, consejeras delegadas de empresas… El antiguo ministro de Justicia y ahora presidente interino, Mustafá Abdel Yalil, quiere que las mujeres se incorporen al poder. Así lo expresó el lunes antes diez mil personas en Trípoli. Pero en el mismo discurso anunció que la fuente jurídica iba a ser la sharía, es decir, el Corán. Los nuevos jueces que han tomado el mando en el Ministerio de Justicia no ven ninguna contradicción entre una cosa y la otra. «Nosotros no somos ni vamos a ser nunca Arabia Saudí. Aquí conducen las mujeres y hay juezas en los tribunales», señala el magistrado Milad al Gali.
El código no obligará a nadie a llevar el velo, aunque parece algo innecesario porque en Libia casi todas las mujeres acostumbran a ponérselo en la calle. «La sharía no obliga a nadie a decir cómo se tiene que vestir. Pero somos un país musulmán, y aquí no podemos abrir bares donde se venda alcohol, ni prostíbulos», añade Milad al Gali.
«Es una ley que sirve para unir a todas las tribus del país», señala el viceministro de Justicia, Jalif al Gehmy.» Y que en el caso de los crímenes más graves contempla la posibilidad del perdón», añade. No obstante, la norma milenaria permitiría cortarles una mano a los ladrones o matar a cualquier homicida. «Eso es cierto», admite el juez Jamal Bennour, integrante del gabinete jurídico de Bengasi y desplazado a Trípoli estos días.«Pero en la práctica casi nunca se llega a ese extremo. Porque en esos casos, el criminal tiene que confesar cuatro veces su culpa. Es una opción espiritual. El culpable, en esos casos, elige ser castigado en este mundo para presentarse limpio por dentro al otro mundo. Además, tienen que declarar en su contra al menos cuatro testigos. Cuando no se encuentran suficientes pruebas se aplica el código común. Y eso es lo que se hará en la mayoría de los casos. Casi nunca se llegará a aplicar la pena de dar cien latigazos a nadie».
Los manuales escolares europeos vehiculan estereotipos sobre el islam y los musulmanes
LEMONDE.FR con AFP
15-09-11
Es la conclusión de un estudio alemán realizado en cinco países de Europa y presentado el jueves 15 de setiembre en Berlín. Estos estereotipos “participan de un racismo cultural”, piensan los estudiosos del Geirg Eckert Institut que han pasado al peine fino 27 manuales utilizados en 2010 en las clases de Alemania, Austria, España, Francia y Gran Bretaña.
Este informe pretende ser el primero en Europa.
PRESENTACIÓN SIMPLIFICADA Y OBSOLETA
« El Islam es siempre presentado como un sistema de reglas obsoleto que desde su edad de oro no evoluciona » en oposición a una Europa moderna, se queja Susanne Kröhnert-Othman, directora del proyecto, durante una conferencia de prensa.
Por ejemplo, un libro español describe “el Islam como una sociedad patriarcal y autoritaria, compuesta de agricultores y pastores, que se enfrenta a problemas importantes de adaptación a la modernidad”. Este tipo de representación “no permite luchar contra un populismo islamófobo”, subraya la Señora Kröhnert-Othman.
El Islam se representa a menudo de modo simplista, como una unidad homogénea, sin resaltar su diversidad según las regiones del mundo consideradas, piensan también los expertos, que no han visto diferencias de apreciación notables entre los cinco países estudiados.
INCLUIR LOS PROCESOS DE MODERNIZACIÓN
Los estudiosos recomiendan incluir en los manuales escolares informaciones sobre las reformas musulmanas impulsadas por los religiosos e intelectuales, y también los procesos de modernización.