Alemania va cerrando los capítulos más oscuros de su pasado. Ahora le toca el turno a su breve pero polémica historia colonial con la declaración política sobre lo aconteciendo en Namibia a principios del siglo XX.
La revuelta de los hotentotes y los hereros contra el gobierno colonial alemán, en la entonces colonia conocida como África del Sudoeste Alemana (la actual Namibia), ha traído bastantes quebraderos de cabeza a los distintos gobiernos alemanes incluso a los más recientes. El actual ministro alemán de Cooperación y Desarrollo alemán, Gerd Müller, ha declarado:
«Es nuestro trabajo no olvidar, sino trabajar a través de la Historia colonial alemana y fortalecer el proceso de reconciliación (…) Mientras, está claro que los crímenes y abominaciones cometidos de 1904 a 1908 fueron lo que hoy describimos como genocidio«
¿Masacre? ¿Exterminio? ¿Genocidio? Las utilización de las palabras no son inocentes y el hecho de que el gobierno alemán haya reconocido, explícita y públicamente, el término genocidio en referencia a su actuación en Namibia abre la puerta al pago de futuras compensaciones económicas a los actuales namibios.
Pero, ¿qué ocurrió en Namibia a principios del siglo XX para que Alemania haya tomado tal determinante decisión?
Carlos Font Gavira